Muchas compañías colombianas hacen muy bien su tarea y se destacan en sus sectores silenciosamente, sin aparecer todos los días en los periódicos. Algunas hasta se convierten en ejemplo de cómo empresas de familia pueden perdurar y no morir en el intento de crecer. La clave del éxito ha estado en la constancia, el empuje y la innovación que sus creadores les han querido imprimir.
En las siguientes páginas aparecen tres compañías que llegaron a sus 30 años con más ánimo que nunca y con el impulso de la innovación permanente. Se trata de empresas que nacieron sin mayores pretensiones, pero hoy son exitosas dentro y fuera del país.