POLÉMICA

La red censurada

Los casos de obras de arte y fotografías históricas eliminadas de Facebook o Instagram han llevado a que muchos se pregunten cuál es el límite entre el arte y las imágenes sexualmente explicitas.

12 de noviembre de 2016
La foto de “La niña del Napalm” fue tomada exactamente después de un ataque de las fuerzas estadounidenses cerca de la ciudad de Saigón, Vietnam. | Foto: Nick UT / A.P.

La foto le dio la vuelta al mundo. Una niña de 9 años corre desnuda por una carretera mientras llora desesperadamente. Junto a ella van otros cuatro niños y un grupo de militares. Al fondo, una nube avanza por el camino y parece perseguirlos a todos. Es la imagen de La niña del Napalm, que en 1972 le mostró al mundo los horrores de la guerra de Vietnam y que le valió a su autor, el fotógrafo vietnamita Nick Ut, un premio Pulitzer.

Aunque millones de personas han visto la foto, 44 años después protagonizó un hecho insólito: el 9 de septiembre, Facebook decidió que violaba sus políticas sobre desnudos. El equipo de esa red social retiró la fotografía de la página del escritor noruego Tom Egeland –quien la había subido inicialmente– y le suspendió su cuenta. El hecho generó fuertes reacciones e incluso el periódico Antefpoften, uno de los más importantes de Noruega, sacó la imagen en primera página y le dedicó un editorial a Mark Zuckerberg, fundador y CEO de Facebook.

No es la primera vez que ocurre. Los equipos de las redes sociales están revisando todo el tiempo las imágenes que suben los usuarios para retirar las que consideran pornografía, material sexualmente sugestivo y contenido que invita a la violencia o al racismo. Y aunque según sus políticas las obras de arte (pinturas, esculturas y fotografías clásicas) no son consideradas material explicito per se, sí han censurado obras clásicas, como una imagen de El origen del mundo (1886) de Gustave Coubert –una pintura polémica en su momento por mostrar unos genitales femeninos– subida por un usuario en 2011. También han suspendido cuentas de instituciones oficiales, como le ocurrió al Museo de Filadelfia por subir a las redes la obra Ice Cream (1964) de Evelyne Axell, que Facebook consideró sugestiva.

Para el artista español Marc Montijano, a quien Instagram le retiró la fotografía de uno de sus performances, el problema es que en el mundo aún existe una mentalidad arcaica. “Es simplemente falta de cultura, falta de educación.  Nuestra sociedad avanza notablemente en algunas direcciones, pero en otras involucionamos. Tristemente el desnudo sigue siendo tabú”. Su instalación, llamada Las dos naturalezas (Metamorfosis XXI), reunía a 40 modelos sin ropa que se pararon por varias horas frente a pinturas famosas como si fueran una serie de esculturas vivas.

¿Cuál es el límite entre el arte y las imágenes sexualmente explícitas? Joel Kaplan, vicepresidente de Políticas Públicas de Facebook, aceptó en un comunicado de la compañía que muchas veces la decisión es subjetiva: “Las imágenes con desnudos o violencia aceptables en alguna parte del mundo, pueden ser ofensivas –e incluso ilegales– en otros”. En ese sentido, los propios usuarios de las redes muchas veces juegan un papel determinante pues denuncian lo que consideran ofensivo o explícito.

Para muchos artistas el tema es contradictorio, porque mientras desaparecen algunas obras y fotografías artísticas solo porque contienen desnudos, en las redes abundan la violencia, el odio y los memes ofensivos. Facebook, por su parte, ha reversado algunas decisiones –como la fotografía de La niña del Napalm–, y la semana pasada anunció que revisará sus estándares para decidir qué imágenes debe borrar por contener material explícito.

El tema tiene que ver con el sentido de las obras. Los desnudos y las imágenes sugestivas en el arte casi siempre hacen parte de un contenido profundo, que va más allá del sexo explícito y de lo morboso. De hecho, el desnudo es un tema clásico, abordado por artistas de la talla de Botticelli o Miguel Ángel. Por eso el límite, como dice Montijano, muchas veces viene del sentido común. n

A manera de protesta

La mayoría de artistas censurados reaccionan en contra de estas políticas, que limitan sus publicaciones en redes sociales por considerar su contenido demasiado explícito. Estas son algunas de las respuestas.

-El artista español Marc Montijano decidió publicar 100 veces la foto que le eliminaron de su cuenta de Instagram, para rechazar la censura de esta red social. La imagen, que muestra a 40 modelos desnudos con cuerdas a sus pies y sacos cubriéndoles el rostro, hacía parte de un performance en el que, según Montijano, no había otra intención más que hablar de la espiritualidad y lo que hay más allá del materialismo.

-‘Free the nipple’ o ‘Libera el pezón’ es una campaña social que promueve la igualdad de género. Nació en 2012 con Lina Esco, activista y directora de la película que lleva el mismo nombre del movimiento, que la muestra junto a un grupo de mujeres jóvenes en la lucha por reivindicar su derecho a desnudarse en público, lo que es ilegal en algunos estados de Norteamérica. La iniciativa tiene casi 11.000 seguidores en Instagram y 23.000 en su cuenta de Twitter.

-Kate Hansen, una artista canadiense, decidió retratar a madres con sus hijos recién nacidos para mostrar el miedo que sienten algunas mujeres a fallar en su labor materna y el lazo inquebrantable con sus hijos. Así nació el proyecto de pinturas Madonna and the child, donde varias mujeres posan con sus bebés, en algunos casos mientras los amamantan. Facebook eliminó sus fotografías por considerarlas obscenas, y Hansen decidió publicar más de su trabajo a través de esta red social.