“En la música no es suficiente tener grandes habilidades musicales, también hay que ser creativo”

Desde 1945, Berklee Music College, la escuela de música más grande del mundo, ha trabajado por tener un sello diferencial en la música. Muestra de eso son los más de 200 premios Grammy que se han ganado varios de sus ex alumnos. Sus aulas han recibido a genios como el legendario Quincy Jones, Branford Marsalis, Howard Shore, Diana Krall, Esperanza Spalding y John Mayer. Músicos de todos los lugares del mundo sueñan con entrar a sus aulas, pero solo el 15 por ciento de las personas que se postulan a cerca de 7.000 presentaciones anuales logran pasar.

Este año Panos A. Panay, vicepresidente de Innovación y Estrategia de la escuela, estuvo como invitado al Bogotá Music Market (BOmm), una plataforma en la que músicos del país pueden mostrarle su talento a agentes nacionales e internacionales. Allí dio una conferencia sobre las capacidades que debe aprender un artista más allá de solo dedicarse a crear música. Entre estas están la resolución de problemas, ser creativos y entender las tendencias que hay en el mercado.

Panay tiene un título de administración musical de Berklee y ha trabajado desde hace algunos años en el programa Open Music Initiative (iniciativa de música abierta) para resolver los problemas de derechos de autor, que han afectado a la industria musical en todo el mundo. SEMANA habló con él sobre la música en Colombia y lo qué deben tener en cuenta los nuevos artistas para entrar en el gran mercado.

SEMANA: Colombia, sin duda, es un país musical. Pero ¿cómo Bogotá, donde se concentra la mayor parte de esa industria puede aprovechar ese potencial para que el sector crezca?

P.P.: Ustedes tienen varias ventajas y es que su música se entiende en todo el mundo a pesar de la diferencia de idiomas. La música de Colombia tiene una amalgama de culturas y creo que eso hace la diferencia. Las grandes canciones en el mundo, de hecho, no son en inglés. El mayor éxito ahora es ‘Despacito’ que es en español y eso no pasaba hace quince años. Uno de los mayores temores de la sociedad es creer que la cultura anglosajona domina el mercado y no es así, la gente joven de las grandes ciudades escucha música en diferentes idiomas. Ustedes están haciendo las cosas bien y tienen los ingredientes correctos. Colombia tiene grandes figuras de la música.

SEMANA: ¿Cómo utilizar esa diversidad de culturas de la que usted habla para fortalecer la industria?

P.P.: Se trata de no olvidar que la música no solo es hablar de las presentaciones, también es una plataforma para desarrollar habilidades únicas que pueden ser aplicadas de diferentes maneras. La creatividad es una herramienta clave para las nuevas generaciones y por eso la educación musical debe estar presente en el desarrollo de las nuevas generaciones. Además se necesita coordinar a los músicos y a la tecnología para crear empatía con otras culturas en diferentes países del mundo. En eso creo que la música es como el fútbol, pues las dos generan eso.

SEMANA: ¿Por qué decidió venir al ‘Bogotá Music Market’?

P.P.: Creemos que el mensaje que tenemos que decir es importante y universal. Nos gusta ir a diferentes partes del mundo. Fuimos invitados porque Berklee tiene una larga asociación con Colombia, un país que tiene una gran riqueza cultural y musical. Bogotá, en particular, es la metrópolis donde se concentra todo eso.

SEMANA: ¿Cuál es el perfil que busca Berklee Music College en sus estudiantes?

P.P.: Desde hace pocos años implementamos la estrategia de buscar personas creativas. Nos dimos cuenta de que no es suficiente graduar personas o tener estudiantes con increíbles habilidades musicales, también es importante que sean capaces de crear soluciones.

SEMANA: ¿Cómo podemos enseñarles eso a los músicos de Colombia?

P.P.: Necesitamos aprender que para tener éxito en una carrera musical no es suficiente ser un gran músico. Tienes que estar dispuesto a entender la industria, las curiosidades y tener las habilidades para avanzar a través de ellas.

SEMANA: Usted habla del jazz como gran catalizador de avances creativos en los negocios, ¿cómo ayuda a esos procesos?

P.P.: Yo no solo hablo del jazz, sino de la música en general. El jazz tiene varios atributos como la improvisación. Pero eso es lo que también tiene la música en general y es una forma de crear ideas. Los músicos de jazz, y todos en general, tienen que ser buenos escuchando y colaborando con otros grupos. Estos son los elementos que pueden servir para que sean más innovadores.

Semana.com: ¿Qué espera encontrar en Bogotá?

P.P.: La música es la expresión de una cultura, de los sueños, creencias, esperanzas y conflictos. Eso es lo que se convierte en música y eso lo que espero descubrir aquí. La historia de la música de Colombia tiene varias influencias de sonidos africanos y de otras culturas. La música es una verdadera expresión, es cómo una persona se siente en una situación particular, no es acerca de lo que alguien piensa o dice, sino de lo que siente.