ECONOMÍA

El precio del dólar se ‘enloqueció’ en Colombia

El comportamiento de la divisa causa desconcierto al subir su cotización como espuma.

2 de diciembre de 2014
| Foto: Ilustración Gabriel Peña

La cotización del dólar está imparable. Hoy siguió subiendo y se encuentra en un nivel promedio de 2.293 pesos, 41 pesos por encima frente al precio registrado ayer.

Pero la divisa incluso llegó este martes a un precio máximo de 2.306 pesos, con lo cual rompió la barrera de los 2.300 pesos, una cifra que no estaba en los cálculos de ningún analista económico.

¿Qué está pasando para que la cotización de la divisa esté subiendo como espuma? Una de las primeras explicaciones es que el desplome de más del 30 % en los precios del petróleo en los últimos meses ha llevado a un gran nerviosismo en los mercados. En el caso colombiano se esperaría un menor ingreso de divisas del sector de hidrocarburos, que representan cerca del 50 % de las exportaciones totales del país.

Con una menor oferta el precio se encarece. Además, frente a las expectativas de que la Reserva Federal (Banco Central de Estados Unidos) aumente sus tasas de interés, muchos inversionistas prefieren poner sus recursos en títulos del tesoro de la nación del norte, que son más seguros.

Si bien estos dos factores tienen un gran peso, lo cierto es que el aumento en la cotización del dólar ha sido más brusca y acelerada de lo esperado. Rafael Aparicio, presidente de Acciones y Valores, sostiene que el mercado ha sobrerreaccionado y que estas altas volatilidades no le convienen a nadie porque es muy difícil hacer proyecciones.

En lo corrido del año la devaluación de la moneda es del 19 %. Es decir, ha subido 365 pesos.

¿Cómo terminará el año y qué se espera para el 2015? Este es un interrogante difícil de responder. Los analistas dicen que seguirá la volatilidad y es probable que la divisa se sitúe este año entre 2.300 y máximo 2.400 pesos, pero nuevamente descenderá y se podría ubicar alrededor de 2.200 pesos en el 2015.

Por lo pronto, los que beneficiarán con esta alza son los caficultores y los exportadores en general, pero se afectarán quienes viajen al exterior porque tendrán que pagar más pesos por cada dólar.

Para el Gobierno el panorama es agridulce porque, de una parte, una mayor devaluación ayuda a compensar el desplome en los precios del petróleo –el barril del Brent está por debajo de 70 dólares-, pero le encarece el servicio de la deuda externa.