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Colombia apunta a nuevos mercados farmacéuticos con estándares internacionales y sello Invima
La industria farmacéutica colombiana ya realiza un abastecimiento sólido del 80 % del mercado interno y exporta productos a más de 16 países.

Colombia tiene las características necesarias para convertirse en un actor exportador de medicamentos, sin embargo, todavía es indispensable avanzar hacía un sistema regulatorio más ágil y predecible. Así lo menciona La Asociación Colombiana de la Industria Farmacéutica (ASCIF) en su más reciente informe.
Un aspecto que fortalece significativamente el potencial de esta industria en el país es el sello Invima. Para ASCIF que agencia sanitaria de referencia nivel IV de la Organización Mundial de la Salud (OMS), implica que los procesos, normativas y decisiones sanitarias del país son de altos estándares confiables para el mundo, lo cual fortalece la reputación de la industria nacional.
Bajo este contexto, más de 100 plantas farmacéuticas en Colombia están habilitadas por el Invima, lo cual es sinónimo de prestigio y capacidad técnica.
“Como ASCIF, proponemos establecer una ventanilla única de exportación para productos ya registrados, promover la convergencia regulatoria con países de la Alianza del Pacífico y reforzar la capacitación técnica del personal sanitario y del sector productivo”, advirtió Clara Isabel Rodríguez Serrano, directora ejecutiva de ASCIF.
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Así mismo, la directora ejecutiva afirma que este reconocimiento permite que la industria acceda a licitaciones internacionales con el fin de evitar inspecciones y reducir costos operativos, contribuye con el cierre de brechas de percepción frente a la calidad del medicamento nacional.
A pesar de que la industria nacional ya exporta a más de 16 países, en el informe se menciona que para expandir este portafolio es necesario fortalecer la inversión en I+D, flexibilizar la regulación de ensayos clínicos y promover compras públicas que valoren la producción nacional.