El dinero en efectivo sigue siendo predominante en los municipios turísticos de Colombia

Para los colombianos es fundamental tener dinero en efectivo en su billetera. Así lo confirmó el Banco de la República en marzo de 2023, a través de los resultados que arrojó un estudio sobre la preferencia de los medios de pago.

El uso del efectivo está por encima de las tarjetas débito, crédito y las transacciones electrónicas, con porcentajes que varían entre el 65 y 80 por ciento de los habitantes de las ciudades principales (Bogotá, Medellín, Cali y Barranquilla) y en el resto del territorio colombiano es incluso más alto.

Los cajeros automáticos siguen siendo estratégicos en la dinámica económica del país, especialmente en zonas apartadas de la capital. Por esto, no solo se convierte en una necesidad para los habitantes de esos lugares tener acceso a cajeros, sino para los turistas también, al desconocer qué tan sencillo es hacer transacciones en un sitio ajeno a su cotidianidad.

Cobertura nacional

La Red Verde de cajeros Servibanca tiene una de las mayores coberturas a nivel nacional y, de hecho, durante sus casi 40 años de historia, ha priorizado llegar a lugares donde el acceso a estos dispositivos es precario.

Dentro de los lugares más turísticos en los que esta compañía cuenta con cobertura en el país están Barú, Barichara, Mompox, Coveñas, Providencia, Tolú y Villa de Leyva, entre otros.

Desde Servibanca explican que extender la cobertura de cajeros electrónicos en un país como Colombia no es sencillo. Uno de los mayores retos de hacer presencia en 788 ciudades y municipios del país, en muchos de ellos con un servicio de 24 horas todos los días, es la distancia y la dificultad de acceso. Además, las largas temporadas de lluvias obstaculizan aún más la labor.

No obstante, esta red está presente en aeropuertos, terminales de transporte terrestre, estaciones de servicio y grandes superficies, entre otros, y cuenta con servicios adicionales, como el procesamiento de órdenes de pago o transferencias de fondos, pago de servicios públicos, donaciones, impuestos y trámites de la Cancillería.