Video: volver a la universidad después de haber estado 15 años en las Farc

“Cuando estaba en la guerrilla no pensaba en el futuro, porque en la guerra puedes morir en cualquier momento. Pero cuando llegué a Bogotá, me enfrenté a una vida que se quedó pausada. Tuve la oportunidad de retomar mi sueño de continuar con mi carrera profesional”, cuenta Manuel Bolívar, excombatiente de las Farc en un video que hizo junto a Juan David Niño Leguizamon, uno de sus compañeros de clase del programa de Sociología para contar una pequeña parte del proceso de reincorporación. 

Manuel fue excombatiente del bloque oriental de las Farc desde 2001. Llegó a la guerrilla sin haber terminado su carrera de Comunicación Social- Periodismo en la Universidad Santo Tomás y de Sociología de la Universidad Nacional. Trabajaba en el área de comunicaciones de la guerrilla. Hacía videos y editada contenidos sobre su lucha. Esta información llegaba a los guerrilleros escondidos en las montañas que no tenían cómo informarse durante la guerra. Nunca imaginó que a sus 40 años estaría nuevamente en un salón de clases rodeados de jóvenes. 

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Tras la firma del acuerdo de paz entre las Farc y el Gobierno, el Sistema Universitario Estatal (SUE), en el que se agrupan las 32 universidades públicas del país, anunció en 2017 con bombos y platillos su oferta educativa para los excombatientes de las Farc con la intención de que ingresaran a la educación superior de manera gratuita. Manuel, al igual que muchos excombatientes soñaron con continuar su vida universitaria, esa que habían dejado atrás cuando eligieron incorporarse a las filas armadas. 

Sin embargo, ese empujón nunca llegó. Manuel cuenta que esperó un año por el supuesto cupo, y al ver que no era una opción cercana, decidió buscar una oportunidad por su cuenta. Le envió una carta al Consejo Superior Universitario de la Universidad Nacional solicitando su reintegro, pues había abandonado su carrera cuando estaba en sexto semestre. Lo aceptaron en 2018, y este año regresó a cursar el quinto semestre de Sociología. 

"Mi primera clase fue en abril. Ese primer día el profesor nos pidió que nos presentarámos. Rompí el hielo diciendo que yo había sido guerrillero de las Farc y que estaba haciendo mi proceso de reincorporación. Algunos estudiantes se sorprendieron y otros estaban entusiasmados, porque después de clases se me acercaron a hablarme”, cuenta Manuel en el video. 

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Hoy, como parte de su proceso de aprendizaje, Manuel espera realizar un estudio conceptual sobre su vida en la guerrilla desde una mirada sociológica. “Esta es una forma también de decir que mi proceso de reincorporación no está aislado de mi proceso político de transformación social”, cuenta.  

Isabela Sanroque, también excombatiente de las Farc, daba por sentado que al ingresar a las Farc jamás volvería a pisar a una universidad. Sin embargo, esa idea empezó a cambiar cuando sus superiores iniciaron el proceso de paz con el Gobierno. Hoy es estudiante de licenciatura en Ciencias Sociales en la Universidad Distrital gracias a su esfuerzo y a sus calificaciones. 

Aunque en un principio el rector de la Universidad Pedagógica, Adolfo León Atehortúa, le prometió homologar algunas materias de la Licenciatura de Ciencias Sociales que dejó para irse a la guerrilla, nunca pasó. Decidió aplicar a la Universidad Distrital con la esperanza de que en esta institución pudiera validar algunas materias. Y así fue. 

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“Las universidades deberían tener becas o cupos para que los excombatientes ingresen a la educación superior de una manera flexible. No digo que nos tengan que regalar el cupo, porque tenemos toda la capacidad para ingresar. Pero resulta que hay camaradas que están terminando el bachillerato y para ellos no será tan sencillo acceder a la universidad”. Isabela se refiere a quienes siguen en las ETCR, en donde las universidades públicas no llegan. 

Pero no todos han tenido tanta suerte. Antonia Nariño aprobó el examen de admisión para regresar al programa de Ciencias Sociales de la Universidad Pedagógica Nacional. Y, aunque estuvo matriculada por un tiempo, reuninció nuevamente para ir a enseñarle a sus compañeros que viven en los ETCR y que no tienen acceso a la educación básica. "Se nos dificulta mucho el estudio presencial, porque también tengo responsabilidades en el partido como ir a dar clases a los espacios territoriales. Casi no me quedaba tiempo para hacer esas tareas y decidí cancelar el semestre". 

Sus historias son un fiel reflejo de la díficil situación que están viviendo los excombatientes que esperan ingresar a las universidades. Si bien, en los últimos meses se ha visto algunos excombatientes obtener su diploma de primaria, todo parece indicar que será el último nivel educativo que cursarán. Pues, por ahora no existe ninguna estrategia por parte de las universidades públicas o del Gobierno Nacional para ofrecerles un futuro profesional.