Sitiados por las drogas

Los españoles viven una pesadilla por el comercio descontrolado de heroína en las ciudades. Parques inundados de jeringas, jóvenes drogados en las escaleras de los edificios y letreros amenazantes en las calles se han convertido en parte del paisaje en barrios populares de Madrid, Barcelona, Sevilla y Valencia. En Madrid, por ejemplo, un solo barrio puede tener más de 30 tiendas de droga ubicadas en casas y edificios abandonados. Las asociaciones vecinales acuden a las autoridades para buscar ayuda y organizan cacerolazos para protestar contra el aumento de los narcopisos, como se conoce a esos espacios, pero no han logrado alejarlos de sus hogares Ante las redadas policiales, los narcotraficantes idearon un código con telas de colores: blanco para indicar que hay heroína disponible, azul como señal de que la Policía vigila el lugar y rojo para avisar que las existencias se han agotado, como informó el diario londinense The Guardian. Alrededor de estos lugares abundan la prostitución, las peleas callejeras, las amenazas y todo tipo de acciones violentas. Mientras los alcaldes se comprometen a atacar este delito, la Policía recomienda a los propietarios levantar tapias para proteger las casas deshabitadas.

No solo para casados

La Corte Constitucional determinó que de ahora en adelante no se deberá usar el término ‘visita conyugal’, por considerarla excluyente y discriminatoria, sino ‘visita íntima’. La sentencia del magistrado José Fernando Reyes dice que la palabra conyugal deja por fuera cualquier relación no marital, lo cual va en contra de la ley que reconoce el derecho a este tipo de visitas así no haya declaración formal ni pública de una relación, y también incluye a las parejas del mismo sexo. El texto dice que la visita íntima “tiene relación directa con los derechos fundamentales a la intimidad personal y familiar y por tanto, a los derechos sexuales y reproductivos, así como al derecho al libre desarrollo de la personalidad”. La corte hizo esa aclaración ante la tutela de una mujer en detención domiciliaria a quien le negaron la visita con su compañero sentimental, recluido en la cárcel Modelo de Bogotá. La corte también determinó que las personas con casa por cárcel podrán movilizarse, previo aviso al Inpec, al sitio donde tendrá lugar el encuentro, pero deberán asumir el costo del desplazamiento.

¿El fin de los camioneros?

Los camiones de Waymo, el proyecto de conducción automatizada de Google, empezaron a rodar por las carreteras de Atlanta. En sus primeros viajes transportarán carga a los centros de la compañía para medir el éxito de esta tecnología, que usa conexión wifi, sensores, geolocalización y cámaras para dirigir los recorridos. Ante el riesgo de que los reemplacen vehículos automatizados, más de 3 millones de camioneros de Estados Unidos están dispuestos a pelear para conservar sus trabajos. Para disminuir las tensiones y evitar accidentes, cada camión llevará un humano en la cabina, que reaccionará en caso de que el sistema falle, pues, según la empresa, “Nuestro ‘software’ está aprendiendo a conducir plataformas grandes de la misma manera que lo haría un conductor humano después de años de conducir autos de pasajeros”. En este caso, el hombre será el asistente de la máquina.