EL GRAN SECRETO

El gran secretoLas revelaciones del libro de Claude Gubler, el médico personal de Mitterrand, tienen en conmoción a los franceses.El escándalo sigue rondando la muerte de François Mitterrand. La publicación de un libro sobre la enfermedad del mandatario francés, sólo seis días después del funeral, ha generado toda suerte de controversias. En primer lugar, porque el autor es nada menos que el médico personal del ex presidente, el doctor Claude Gubler. Y en segundo, porque el libro reveló que el mandatario supo desde 1981 que padecía cáncer y, durante 11 años guardó silencio. Pero además, Gluber afirma que durante los seis últimos meses de su mandato, Mitterrand estaba "físicamente incapacitado para hacerse cargo de sus asuntos". Estas revelaciones, sumadas a la indignación sobre la violación de la confidencialidad, llevaron a la familia de Mitterrand a entablar una demanda en la Corte con el propósito de detener la venta del libro, titulado El Gran Secreto. Georges Keijman, abogado de la familia del ex presidente, acusó a Gubler de haberse beneficiado de su amistad y, aunque ganó la demanda, algunos apartes ya habían aparecido en la prensa francesa y la primera impresión de 40.000 copias estaba totalmente vendida. Los antiguos colaboradores de Mitterrand y los miembros del gabinete refutaron la afirmación de que el presidente estuviera incapacitado para desempeñar sus funciones en sus últimos meses de mandato. Sin embargo, no han sido pocas las voces autorizadas que han criticado la actitud del mandatario quien, después de su elección, prometió publicar comunicados sobre su salud y desde el inicio de su gobierno aseguró que se sometería a exámenes médicos regulares Pero seis meses después de la posesión, Mitterrand supo que sufría un cáncer avanzado de próstata _afirma el médico_ y que su expectativa de vida era de tres meses a tres años. Entonces decidió que su enfermedad sería un 'secreto de Estado'. Gubler dice que el mandatario le insistió en que firmara boletines regularmente sin mencionar ese asunto y que, en 1988, cuando se lanzó a la reelección, ya sabía que estaba viviendo tiempo extra. Aparte del debate político, ha sorprendido el hecho de que Mitterrand lograra sobrevivir 14 años con un cáncer avanzado. El médico afirma que la respuesta del mandatario al tratamiento fue tan asombrosa que su paciente se convenció que estaba curado. Lo cierto es que sólo hasta 1992, cuando el mandatario fue sometido a una intervención y las muestras de tejido confirmaron que la enfermedad se había propagado, los franceses se enteraron de su condición, la cual fue presentada como un reciente descubrimiento. En su libro Gluber afirma que sólo una vez Mitterrand consideró la posibilidad de mencionar públicamente su enfermedad. En junio de 1990 el presidente estaba contemplando la idea de renunciar, aparentemente por asuntos personales, y quería usar su enfermedad como pretexto. Pero con la crisis del golfo, desechó la idea y nunca más habló del tema. Ahora, Gluber alega en su defensa que Mitterrand le pidió que revelara algún día todo este episodio. La semana anterior la Asociación Médica Francesa señaló que realizará audiencias disciplinarias contra el médico del mandatario. Si se demuestra que Gubler violó el secreto profesional, le impedirán volver a ejercer la medicina en Francia. Pero esta medida podría ser meramente simbólica porque Gubler ya solicitó que su nombre sea retirado del registro médico.