El 'brexit' de Theresa May naufraga en el Parlamento

Como se anticipaba, el Parlamento hundió la iniciativa con 432 votos en contra y 202 a favor. Se trata de una de las derrotas más humillantes en la historia de ese país, y crea incertidumbre sobre cómo se producirá la separación del Reino Unido y la Unión Europea. 

El proyecto de May, en el que negoció con la Unión Europea (UE) algunos puntos sobre comercio y fronteras, principalmente, fue rechazado tanto por los impulsores del referendo, quienes lo veían como una “traición al espíritu del brexit", como por quienes se oponen a abandonar el bloque y abogan por un brexit aún más blando. 

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Con la derrota se barajan varias opciones. La semana pasada, el Parlamento le exigió a May un plan B que tendrá que presentar en tres días, pero la primera ministra siempre ha insistido en que de no firmarse su acuerdo, el Reino Unido abandonaría de cualquier forma el bloque europeo el próximo 29 de marzo, como está estipulado. Ese es el llamado ‘brexit duro’, del cual muchos analistas y la propia May dicen que tendría consecuencias económicas catastróficas para el país.

Otra opción es que se extienda el tiempo de negociación si Londres lo pide y los 27 miembros de la Unión Europea están de acuerdo. Se cree que ese plazo no podría ir más allá de julio de este año, pues en ese mes se inaugura el nuevo Parlamente Europeo tras las votaciones del 26 de mayo.

Pero, con el bajo margen de maniobra con el que queda May, esos meses extra quizá no sirvan para nada. Por eso, podrían plantearse medidas aún más drásticas, entre ellas la destitución de May y la conformación de varias alianzas parlamentarias que busquen un ‘brexit blando‘, en contra de las alas más radicales del conservadurismo que le apuestan a un brexit sin atenuantes.

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Por su parte, los laboristas, en cabeza de Jeremy Corbyn, podrían buscar elecciones anticipadas para intentar tomar el control del Parlamento y buscar un brexit más suave. Incluso, una facción de ese partido presionaría por un nuevo y definitivo referendo sobre el tema, pero esa es una alternativa con oposición dentro del partido y, por supuesto, dentro de los conservadores.

Por ahora, Corbyn propuso una moción de censura hacia la mandataria en la que alega "su incompetencia para seguir en el cargo". 

La guerra política en Reino Unido al parecer solo está empezando.