JUSTICIA

El proceso que Ordóñez no se ha quitado de encima

El proceso contra el procurador por una posible irregularidad en su elección ha tenido interesantes desarrollos.

26 de mayo de 2014
Alejandro Ordóñez. | Foto: Guillermo Torres

Desde hace siete meses en la sección quinta del Consejo de Estado hace tránsito un proceso que busca tumbar la elección del poderoso procurador general, Alejandro Ordóñez. En las tres demandas de los juristas José Leonardo Bueno Ramírez, Rodrigo Uprimny Yepes y Carlos Mario Isaza se ha señalado que la votación estuvo viciada.
 
Los demandantes advierten que el procurador general “ha usado su facultad de nombrar discrecionalmente funcionarios para beneficiar en el acceso a cargos públicos a los familiares de las personas competentes que intervinieron en su designación, específicamente a los familiares de los magistrados Javier Zapata Ortiz, Jorge Mauricio Burgos Ruiz y la magistrada Ruth Marina Díaz, y José Leonidas Bustos, quienes tenían la facultad de postularlo”.
 
Pero además argumentaban que no hubo terna ya que cuando salió escogido Ordóñez una de las integrantes, María Mercedes López, se retiró antes de la votación. También señalan que los magistrados de la Corte Suprema que escogieron el nombre de Ordóñez para integrar el trío de candidatos tenían familiares en esa entidad.
 
Estas demandas fueron unificadas para simplificar el caso y fue escogido como ponente el magistrado Alberto Yepes Barreiro. El proceso, que no ha despertado mayor interés en la opinión, tuvo un interesante desarrollo la semana pasada y puso en peligro la estabilidad en el cargo de Ordóñez.
 
La sala está integrada por cuatro magistrados, pero desde hace ocho meses hay una vacante que no ha podido ser reemplazada. Por lo tanto, en la votación de Ordóñez participaron tres magistrados. Ahora se sabe que dos de tres magistrados votaron a favor del jefe del Ministerio Público, mientras que el tercero votó en contra.
 
Según las reglas de la Corporación, Ordóñez necesitaba los tres votos para sellar su triunfo. No obstante, y ante este resultado, la sala decidió nombrar una cuarta persona, es decir, un conjuez externo, para definir el caso. De llegarse a un empate, la Sección Quinta deberá escoger a otro conjuez para resolver la discusión jurídica.
 
En la pasada discusión, los dos magistrados que estuvieron del lado del procurador acogieron la tesis según la cual los familiares de magistrados que laboraban en la Procuraduría llegaron allí por sus méritos. Además, aseguraron que la terna de donde fue escogido Ordóñez sí cumplía los requisitos de ley.
 
La magistrada que no respaldó a Ordóñez dejó sentada su voz en el sentido de que sí existe una causal para que se declare nula la elección del funcionario porque para ella, existieron irregularidades en la conformación de la terna, además de las dudas que dejó el hecho de que magistrados tuvieran familiares en el Ministerio Público.

De esta manera, el procurador no ha podido quitarse de encima este problema que lo ronda desde hace meses y que, no se descarta, le puede generar un verdadero dolor de cabeza.