“La elección va a ser un referendo por la paz”

El analista Alejo Vargas, politólogo y máster en política social, opina que un nuevo período del mandatario es indispensable: "Si no hay reelección se acaba el proceso de paz. No es la tradición colombiana que los gobiernos sigan políticas en este campo. Cada presidente tiene su propio proyecto de negociación".

Para Vargas, una de las connotaciones del anuncio de la reelección es que desde ahora, Santos es el candidato “con mayor opción de ganar la contienda presidencial”.

“El presidente será el candidato más fuerte ya que tiene toda la exposición mediática y los recursos del poder propio del Gobierno. Va a actuar es la coalición", explica.

Por su parte, el presidente de la Fundación Cultura Democrática, Álvaro Villarraga, asegura que “la reelección casi es un plebiscito obligado… Santos, como cualquier otro presidente con el régimen de reelección definida, buscará prolongar sus políticas haciendo las adecuaciones del caso… el proceso de paz se ha convertido en el compromiso principal del Gobierno”.

Sin embargo, para el analista, un segundo período de Santos no es la única garantía para darle continuidad a los diálogos. “Eso no significa que otro eventual presidente no pueda estar comprometido con el proceso de paz, a excepción del uribismo”.

La oposición debe jugar un papel importante, sobre todo en el tema de la paz, señala Villarraga, por lo cual los candidatos deben hacer un gran pacto nacional, tener “unos mínimos acuerdos no sólo en respaldo a la paz en general, sino en respaldo al proceso de diálogo en curso y darle continuidad”.

Sobre el futuro de los diálogos con las FARC luego de las elecciones, la periodista y columnista Salud Hernández opina que el proceso “es un invento de Juan Manuel Santos, entonces él es la persona para darle continuidad porque le da a la guerrilla lo que quiere. Puede continuarse de otra forma, pero siendo invento suyo, si llega otra persona a meterle la mano, se cae”.

En cuanto al papel que la oposición jugaría en el caso de un segundo período de gobierno del mandatario, Hernández opina que “sería el mismo que juega hoy. Habría una Unidad Nacional otra vez, una derecha extrema de francotiradores y una izquierda insignificante; a menos que (Álvaro) Uribe dé la sorpresa y obtenga un resultado espectacular, pero el panorama no cambiaría”.

Por su parte, Laura Gil, internacionalista y politóloga, opina que la administración actual es la única responsable de articular con el próximo período presidencial lo adelantado en la mesa de negociación hasta ahora. “No sería posible hacer un empalme en el proceso de paz (con otro gobierno) porque (Santos) es el único que ha dado las garantías para que se haga”.

“La elección va a consistir, básicamente, en un referendo por la paz; va a ser la propuesta de guerra versus la propuesta de paz. Por más que llegara alguien que tenga esa visión, es este Gobierno con su equipo el que se sentó en la mesa”, afirma la analista.

Por otro lado, en el panorama político, Gil ve a una izquierda que apoya a Santos en la segunda ronda, “porque el proceso de paz la aglutina detrás de él. Tal vez el uribismo se aglutine alrededor de Uribe desde el Congreso, ojalá de forma organizada, no desde Twitter”.