MEDIO AMBIENTE
“En la reserva actual sólo hay potreros comunes”: Peñalosa
Una polémica ha desatado el alcalde Enrique Peñalosa por el anuncio de construir en parte de la reserva forestal Thomas van der Hammen.
Con el anuncio de urbanizar una gran zona del norte de Bogotá, el alcalde Enrique Peñalosa abrió la puerta a un debate que promete estar en la agenda en los cuatro años de su gobierno. Se trata de la construcción de soluciones de vivienda en una parte de la reserva forestal Thomas van der Hammen.
El martes, tras una reunión con el presidente Juan Manuel Santos y varios de sus ministros, Peñalosa anunció que se habilitarían en tres zonas 10.000 hectáreas para construir 80.000 soluciones de vivienda: Usme, las orillas del río Bogotá y la zona norte. De inmediato, quienes conocen el tema se preguntaron si el alcalde pondría en peligro las 1.400 hectáreas de la reserva forestal Thomas van der Hammen, que conecta los cerros orientales con el río Bogotá, en la zona norte.
Tras la polémica este jueves el alcalde salió a defender su propuesta. En su perfil de Twitter señaló que la reserva actual “en cuya inmensa mayoría sólo hay potreros comunes, no se podrían hacer ni ALO, ni Ave Ciudad Cali, ni autopista Cota-170”.
Para el mandatario, la propuesta que tiene es mejor para el medio ambiente que lo que establecieron los expertos hace 20 años. La razón, sobre esa zona se podría construir un gran proyecto de vivienda con parques lineales, vías para bicicletas.
“Menos ocupación sabana, menos carros, menos calentamiento global”, escribió en su red social Peñalosa.
Una de las razones para defender su iniciativa es que si no se construye en esa zona, las personas que buscan soluciones de vivienda tendrían que desplazarse hacia pueblos aledaños con las consecuencias que eso tendría, por ejemplo, ingreso de carros y las consabidas congestiones en las entradas de la ciudad. Además, mayor contaminación por la emisión de gases.
En el Distrito buscan que la ciudad se desarrolle de manera compacta. Además señalan que sobre esta reserva habrá 1.700 hectáreas de parques, 300 más que las que tiene la reserva.
Otra de las razones de la administración es que si se construye en esta zona se podría garantizar el transporte público, pero no sucede lo mismo si llegan a vivir en las afueras de la ciudad.
Aunque es cierto que en buena parte de la reserva existen zonas que son tierras usadas para ganadería y algunos cultivos, para conocedores del tema la reserva tiene valor por su estructura ecológica y recreativa para la ciudad.
Para el exministro de Ambiente Manuel Rodríguez Becerra, esta zona se designó hace 20 años por unos expertos para que fuera un lugar de restauración ecológica, “(Peñalosa) acaba con la idea de tener un parque de recreación ecológica (…) no hay un proyecto en América Latina más ambicioso”, dijo a la W Radio al programa ‘Feliz Regreso’.
Ya Peñalosa había intentado urbanizar esa zona. En su pasada administración presentó argumentos en la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca para que se pudiera construir allí. En su momento esa entidad lo negó.
Lo que viene es un gran debate ya que de por medio está la idea de entregar soluciones de vivienda y por el otro, mantener una disposición para que se respete una reserva ecológica que no tiene parangón en el país ni en América Latina.