ENTREVISTA
“Es inconcebible que Pastrana esté por el No”: Gonzalo de Francisco
Gonzalo de Francisco, quien acompañó al expresidente en la puesta en marcha del proceso del Caguán, le envió una dura carta a su exjefe para criticar su cambio de postura frente a la paz.
SEMANA: ¿Por qué decidió enviarle una carta pública a Pastrana en la que cuestiona su actitud frente al proceso de paz?
GONZALO DE FRANCISCO: Por dos razones. Una, porque soy un convencido del daño tan inmenso que produciría el No si llegara a triunfar. Y dos, porque fui testigo del esfuerzo que hizo el presidente Pastrana para sacar adelante una negociación con las Farc. Entonces, sus argumentos eran otros.
SEMANA: ¿Cuáles?
G.D.F.: Siempre nos insistió en que la paz era su mayor prioridad y por eso dejó que los costos políticos del Caguán afectaran lo que hizo como gobernante. Durante su gobierno hizo muchas cosas exitosas como el Plan Colombia, enfrentó la crisis económica y manejó la crisis carcelaria. Esas cosas fueron opacadas por su insistencia en sacar adelante el proceso con las Farc. Y ahora, cuando era el momento de reivindicar esa obsesión que tuvo por la paz, se opone a ella con argumentos cuestionables.
SEMANA: En su carta usted afirma que durante el proceso de paz del Caguán nunca hubo un momento de negociación. ¿A qué se refiere?
G.D.F.: Las Farc en ese entonces no estaban listas para un proceso como el que se ha dado ahora. Como le digo al presidente Pastrana en la carta que le envié: toda su negociación se fue en procedimientos, en la discusión de garantías y en metodología, mientras el país sufría una ofensiva inclemente de las Farc basada en el uso indiscriminado de cilindros bombas, y de afectación de corredores viales que los colombianos no comprendieron ni nunca aceptaron. Ni siquiera el esfuerzo del propio presidente, de Camilo Gómez y de Juan Gabriel Uribe como negociadores pudo cambiar esa situación. No obstante, el presidente insistía en la importancia de encontrar una salida negociada con la guerrilla.
SEMANA: Víctor G. Ricardo, comisionado de paz de Pastrana, respaldó el Sí. Ahora usted como exconsejero asume una postura crítica. ¿Puede decirse que el expresidente se quedó sin el apoyo de quienes lo acompañaron en el proceso del Caguán?
G.D.F.: Al presidente Pastrana parece no importarle ese tema. Hay algunos de sus antiguos colaboradores que lo acompañan en su postura por el No. En mi caso creo que es una inmensa equivocación para una persona que en su momento hizo esfuerzos tan grandes a costa de su prestigio para lograr la paz con las Farc.
SEMANA: ¿Cómo interpreta que después de jugársela por el proceso del Caguán, ahora Pastrana esté por el No?
G.D.F.: Para mí es un hecho incomprensible. Si la razón es que le hace oposición a Santos, creo que la paz con las Farc debería estar por encima de ese tipo de argumentos políticos. Lo peor es que, después de que la búsqueda de la paz fue el eje de su mandato y el así nos lo repetía, no tiene sentido verlo aliado con Álvaro Uribe, que solo cree en la aniquilación de las Farc. Para muchos de quienes estuvimos en su gobierno, esa imagen es impresionante.
SEMANA: Usted, que también participó en los procesos de negociación que llevaron a la desmovilización final del M-19, EPL, PRT, Quintín Lame y Corriente de Renovación Socialista, ¿qué opina de las críticas que el expresidente le ha hecho a la metodología de lo acordado en La Habana?
G.D.F.: El actual proceso es un ejemplo mundial de la forma en que se debe estructurar y negociar un conflicto armado con una guerrilla. Negar esto es tapar el sol con las manos. El que se haya llegado a un acuerdo final es una muestra inocultable de este hecho. Es casi imposible encontrarle una crítica a lo realizado por Humberto de la Calle y Sergio Jaramillo. Mientras el proceso durante el gobierno de Pastrana se basó en la teoría de realizar gestos para llegar a acuerdos finales, el del presidente Santos se ha basado en la teoría de negociar posiciones. Esto metodológicamente es más práctico cuando se negocia con una organización como las Farc: basta con comparar las fotos del Caguán con las de La Habana. En el Caguán, los dos equipos se sentaban mezclados, en La Habana, muy formalmente, y hasta la última etapa, cada uno se sentó a cada lado de la mesa.
SEMANA: ¿Qué es lo que más le critica a Pastrana en su postura a favor del No?
G.D.F.: No es el estar con Álvaro Uribe, sino pasar de defender la paz a asumir una postura egoísta porque no considera a las futuras víctimas que dejaría el conflicto armado con las Farc si este continúa. Lo ideal era que el presidente Pastrana no hubiera pensado tanto en lo que no se pudo hacer en el pasado porque, como le digo en la carta, los hombres de Estado están para pensar hacia adelante.
Lea la carta de Gonzalo de Francisco al expresidente Andrés Pastrana.