El polémico decreto de Petro

Desde julio corrieron rumores del decreto que regularía el uso de espacios públicos en Bogotá. Se decía que la normativa obligaría a los comerciantes y a los trabajadores informales a pagarle al Distrito por cualquier actividad comercial.

Para concretar la medida y finalizar la discusión, sólo se necesitaba la firma del alcalde Gustavo Petro. Finalmente, esta semana el mandatario expidió el Decreto 456 del 11 de octubre del 2013.

Este regulará y ordenará el espacio público de la capital a partir del 2014 y, con ello, permitirá “unificar la forma de realizar el debido control con todas las entidades del Distrito, para afrontar los eventos y usos comerciales que particulares vienen dando al espacio público”, informó la Alcaldía.

Blanca Inés Durán, defensora del Espacio Público, desmintió los rumores sobre las posibles afectaciones en algunos gremios. “No habrá afectados. El beneficio será para toda la ciudad porque vamos a organizar la actividad comercial en el espacio público. Ferias, lanzamientos de marcas y mercados sólo se podrán hacer por medio de un cronograma”, concluyó Blanca Inés. 

Por otra parte, la defensora afirma que esta vez la normativa no fracasará en organizar a los vendedores informales, como sucedió en las medidas anteriores. Pero, ¿en qué se diferenciará este nuevo decreto? 

 

Según Blanca Inés, antes se han contratado locales o lotes para reubicar a los vendedores informales que comercialmente no son atractivos. “Son sitios donde no se vende nada porque la gente prefiere no ir, entonces, los vendedores ambulantes optan por volver a la calle”. 

La defensora afirmó que con este decreto, los trabajadores informales podrán estar durante un tiempo en el espacio público y agregó que, incluso, el Consejo de Estado planteó uniformarlos. “Simplemente tendrán que asumir unos compromisos con el Distrito como el de cuidar sus zonas asignadas”, detalló Blanca Inés para Semana.com

A pesar de que a los vendedores informales se les permitirá la manipulación de alimentos sólo en algunas zonas y cuando tengan los cursos que los certifiquen, ellos estarían de acuerdo con la medida, según lo dicho por la defensora.

Otra de las actividades que serán reguladas es la venta de alimentos con marcas específicas en las calles. Esto afecta directamente a la federación de comerciantes Fenalco. La organización reclama que no es justo que a lo vendedores que no están organizados no se les cobre y en cambio a ellos, que tienen una federación y que respetan el espacio público, se les perjudique. Por otro lado, Fenalco afirma que es una medida que pasará desapercibida ya que "muchas administraciones han querido hacer lo mismo y no han podido".

Semana.com habló con el director de esta federación, Juan Esteban Orrego, quien dice que están dispuestos a pagar siempre y cuando sean vistos como iguales. “O todos en la cama, o todos en el suelo”, aseveró Orrego.

Por otro lado, Orrego indicó que lo más grave es la discriminación que genera el decreto entre unos y otros. “Lo que va a pasar es que se incrementará la informalidad en la ciudad, pues muchos comerciantes que apenas empiezan preferirán devolverse a la informalidad, porque no tendrán cómo pagar”. 

Además, le recordó al Distrito que el espacio que ocupan los comerciantes es mínimo en comparación con los vendedores informales. 

Orrego le dijo a la Administración Distrital que los “invite a participar en la discusión del decreto, hay mucho que debatir”.

Las entidades administradoras correspondientes son Secretaría Distrital de Ambiente, Instituto Distrital de Recreación y Deporte, Instituto de Desarrollo Urbano, Departamento Administrativo de la Defensoría del Espacio Público, Alcaldías Locales y Secretaría de Movilidad.

La manera de operar de las entidades administradoras será por medio de una lista de chequeo, que verifique que el usuario cumpla con la totalidad de la documentación, según Blanca Inés. “Además se le realizará el seguimiento, control y vigilancia en la ejecución de cada una de las actividades para que todo se cumpla a cabalidad”, concluyó la defensora.

Así como el decreto firmado por Petro regula las actividades comerciales por las que sí se tendrá que pagar, exime a otras como las culturales organizadas por las diferentes entidades públicas. 

El único requisito para no cobrarles será que no exhiban ningún tipo de publicidad comercial privada en el espacio público.

Además, el decreto ratifica la posición de Petro al ser condescendiente con los voceadores de prensa, lustrabotas y vendedores de loterías, a quienes también exceptúa de cobro.