La presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, y el empresario colombiano Ricardo Morales. | Foto: Archivo SEMANA

MUNDO

El hombre que tiene en jaque a la presidenta de Costa Rica

El viaje de Laura Chinchilla en un avión del colombiano Ricardo Morales generó todo un escándalo.

María del Pilar Camargo, periodista de Semana.com
16 de mayo de 2013

La presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, está devastada. El escándalo por el vuelo privado que tomó para asistir a un matrimonio en Perú la tiene tambaleando, así como ocurre con varios altos funcionarios de su gobierno. No es para menos. El viaje lo hizo en el avión de Gabriel Ricardo Morales, un cuestionado empresario colombiano que terminó enredado en el mundo del narcotráfico y sobre quien, desde el 2009, no se había vuelto a saber.

El escandaloso viaje provocó la salida del ministro de Comunicación de ese país, Francisco Chacón, y para hoy se espera también la dimisión del director de Inteligencia, Mauricio Boraschi.

Los medios de Costa Rica aseguran que no es la primera vez que la presidenta y su círculo más cercano utilizaron el avión de Morales, porque fue en esa aeronave en la que viajaron para asistir al funeral del presidente venezolano Hugo Chávez. Es decir, Morales era un hombre muy cercano a varios funcionarios del alto gobierno.

Pero, ¿quién es Gabriel Ricardo Morales, quien hoy tiene en jaque al gobierno de Costa Rica? En agosto del 2007, la desaparecida revista Cambio conoció una polémica carta que lo mencionaba. “A nivel Bogotá, ‘Chupeta’ tiene un alto ejecutivo con el alias de Rimax o Ricardo. El señor Rimax tiene contactos a nivel ejecutivo que infiltra en las oficinas del director de inteligencia de la Policía y lo mantienen muy bien informado de todas las órdenes de captura y extradición de todos los miembros de la organización”.

El artículo de Cambio asegura que “los investigadores obtuvieron informes confiables en el sentido de que Rimax o Ricardo sería en realidad Gabriel Ricardo Morales Fallón, un reconocido hombre de negocios y gerente de la Comercializadora Autocheco Ltda., importadora para Colombia de automotores marca Skoda, sin registros ni antecedentes penales. Las mismas fuentes consultadas por los sabuesos se refirieron a Pexin S. A., una empresa petrolera en la que, al parecer, Morales tendría algunos intereses”.

Los nexos del fundador de la empresa THX con el narcotraficante Juan Carlos Ramírez Abadía, alias ‘Chupeta’, fueron de nuevo confirmados este jueves por otros medios como el diario digital Crhoy.com, el cual publicó que Morales “ingresó al radar de las autoridades colombianas en el 2003, tras una millonaria importación irregular de lujosos autos Skoda".

Según el medio, Morales volvió a los expedientes judiciales colombianos en febrero del 2009 debido a un escándalo de uso ilegal de dineros de una petrolera, y un año más tarde, fue condenado por el delito de falsedad material en documento público.

Además, en un antecedente reciente, el congresista Simón Gaviria mencionó su nombre en el debate que lideró sobre el descalabro de la firma comisionista Interbolsa.

Según el diario Nación, la firma THX Energy tiene su origen en Panamá, donde fue constituida hace más de 10 años con el nombre Thorneloe Corp. El medio afirma que desde el 2008, Morales ha ocupado la presidencia de la empresa en Panamá de "forma intermitente".

"Esta firma tiene una sucursal en Colombia, cuyas acciones fueron adquiridas en su mayoría, a final del año pasado, por una firma de capital canadiense llamada Birch Island Capital (...) La empresa se dedica a “la exploración y la producción de hidrocarburos”, dice la nota.

El diario asegura, además, que THX Energy ganó en el 2012 "una licitación con el gobierno colombiano para perforar tres pozos en el sector del bloque San Antonio".

La excusa de Francisco Chacón


El hoy cuestionado empresario tocó fondo y provocó la renuncia del ministro de Comunicación de Costa Rica, Francisco Chacón, quien viajó junto a la jefe de Estado en el avión de la empresa de Morales.

El titular explicó que Morales se presentó ante él con una identidad falsa al asegurar que se llamaba Ricardo Ofalan, y reconoció que no se verificó la identidad del sujeto y que el Gobierno aceptó su colaboración en el préstamo de un jet de la compañía para movilizar a la presidenta en dos ocasiones, la primera en marzo, con el fin de asistir al funeral de Chávez, y la segunda, para su viaje a Perú.

"He puesto la cara en más de una ocasión defendiendo las posiciones del Gobierno, siempre creyendo que se actúa de buena fe. En este caso yo defendí la compañía como incuestionable y resultó no serlo, y por lo tanto debo asumir mi responsabilidad política ante el país", manifestó el ministro, quien indicó que deja su puesto porque "aunque no gestioné la obtención del avión ni me correspondía el asunto, he sido el que ha defendió la empresa".

Según Chacón, Morales lo "engañó" y por esa razón ya presentó una denuncia en su contra ante la Fiscalía, pues el empresario es nacionalizado costarricense. En este sentido, Semana.com conoció que Morales tiene más de 100 ingresos aéreos a ese país.

Como ya se mencionó, también se espera la denuncia del comisionado antidrogas de Costa Rica, Mauricio Boraschi, quien reconoció que "fallaron los filtros de seguridad" alrededor de la presidenta, quien antes de que se conocieron los detalles del fundador de THX, justificó como un "aporte" al Estado la utilización del avión privado.

"Este viaje siguió los mismos parámetros de otros donde han mediado aportes de empresas privadas al Gobierno (...) se decide utilizar el aporte para un viaje de la presidenta porque hay una actividad oficial que la justifica", expresó la mandataria.

Mientras se investiga el caso en la Procuraduría de la Ética Pública de Costa Rica, el nombre de Gabriel Ricardo Morales y las investigaciones en su contra vuelven a sonar con fuerza en Colombia, donde el empresario dejó huella por sus vínculos con capos del narcotráfico.