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Después de la desaparición del sector del ‘Cartucho’ en el 2001 la calle del 'Bronx' se convrtió en el nuevo centro de microtráfico en Bogotá. Foto: Edwin Tamayo Rueda. | Foto: Edwin Tamayo Rueda

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Filtran foto que confirmaría la existencia de Pepe, el cocodrilo del Bronx en Bogotá

El reptil, según algunos testimonios, era alimentado con personas condenadas por el grupo criminal denominado como los ‘Sayayines’.

Redacción Nación
13 de mayo de 2024

Hace casi ocho años, exactamente el 28 de mayo de 2016, la Operación Némesis marcó un antes y un después en la historia de Bogotá, tras la intervención de las autoridades con más de 2.500 efectivos de la Policía, 320 militares del Ejército Nacional, 362 agentes del CTI de la Fiscalía General de la Nación y un equipo de funcionarios del distrito, para desmantelar el temido sector conocido como el Bronx.

Durante un largo tiempo, este lugar fue considerado como un sitio de terror marcado por actividades ilícitas, robos, expendio de drogas y aberrantes casos de todo tipo de situaciones que se puedan imaginar, acumulando un sinnúmero de historias escalofriantes que hoy hacen parte de las memorias más aterradoras de la capital colombiana.

Después de esta intervención, se han conocido varios testimonios de testigos que, como parte de sus relatos, reconstruyen los crímenes atroces que se cometieron en este punto del país, todos estos liderados por una temida banda conocida como los Sayayines, que mantenían el control de la zona.

Entre los mitos y leyendas que hacen parte de la historia de la desaparecida ‘olla’ del Bronx, en Bogotá, se dice que todos los que tenían deudas con los Sayayines eran sometidos a terribles torturas y, en ocasiones, hasta acababan con sus vidas al ser trasladados al aterrador rincón en el que se encontraba ‘Pepe’, un cocodrilo que era alimentado con sus cuerpos.

El denominado sector del Bronx, cuya demolición se inició en agosto, estaba ubicado a pocas cuadras de la Presidencia de la República. | Foto: Semana.com

Sin embargo, pese a los testimonios que confirman la existencia de dicho reptil, todavía había quienes ponían en duda esta versión y lo consideraban como una tenebrosa leyenda urbana que, entre el miedo y la incredulidad, pasó a ser parte de la realidad, luego de que las mismas autoridades de control aseguraran que en medio de las labores de inspección, lo habían encontrado sin vida.

“Una vez nos avisan en la Secretaría el hallazgo del reptil, iniciamos con todo el protocolo. Enviamos un equipo de rescate, pero encontramos al reptil lastimosamente muerto (…) Presumiblemente, fue alimentado muchas veces con carne humana y muy probablemente esto fue la causa del fallecimiento del animal”, informó Isabel Carreño, secretaria de Control Animal a Shock.

En el operativo hallaron un túnel que conectaba con una bodega. | Foto: Twitter: @julianquintanat

Foto que confirmaría la existencia de ‘Pepe’

Uno de estos relatos que da cuenta de la existencia del cocodrilo fue compartido por un hombre identificado como Pedro Ruiz, para el programa Los informantes, del canal Caracol, quien aseguró que vivió en carne propia los horrores del Bronx.

Esta es una de las calles de la llamada zona del Bronx, en el centro de Bogotá. Las autoridades tienen identificados seis grupos que venden droga en ese lugar y surten a cerca de 70 sitios de expendio en el resto de la capital.

“Ese cocodrilo lo conocí pequeño, se llamaba ‘Pepe’, lo trajeron como una lagartijita. Después, cuando ya el animal se creció, hicieron un estanque grandísimo para él solo”, contó.

Según las declaraciones del hombre, el animal llegó a medir más de dos metros y su alimentación era aterradora porque sus presas eran personas. Por esta razón, varios medios nacionales, como El Tiempo, han revelado una imagen que se viralizó en redes sociales y que, al parecer, probaría la existencia de ‘Pepe’.

Filtran foto que confirmaría la existencia de 'Pepe', el cocodrilo del Bronx en Bogotá
Foto de 'Pepe', el cocodrilo del Bronx en Bogotá. | Foto: X @chisme_famosos7

En la foto se observa a un reptil imponente y grande que, tal como narró Pedro Ruiz, tenía su propia habitación. Entre las teorías que hablan sobre el final del animal, hay quienes dicen que fue sacrificado y su piel la vendieron en el barrio Restrepo, ubicado en el sur de Bogotá, para la fabricación de calzado y otros productos, pero en realidad, al día de hoy, sigue siendo un misterio.