Ahora camuflan coca en torpedos

La malicia de los narcotraficantes colombianos para producir y traficar cocaína no tiene límites y así quedó evidenciado durante una operación militar desarrollada en los esteros del Chocó.

Este jueves 4 de diciembre miembros de la Armada descubrieron tres campamentos de un grupo disidente de los Rastrojos y con capacidad para alojar a un total de 30 personas; pero lo realmente sorprendente de esa operación es que en el sitio descubrieron una lancha y a su lado un semisumergible tipo torpedo.

Cuando peritos navales analizaron el hallazgo, llegaron a la conclusión que el novedoso artefacto con tecnología criolla, era nueva forma de tráfico de cocaína por el océano Pacífico, y tal sofisticación les permite evadir los controles y patrullajes de las autoridades.

Además, lograron establecer que ese torpedo artesanal elaborado con material PVC, cubierto con fibra de vidrio y cuyas dimensiones son de tres metros de largo por dos de ancho, tiene una autonomía de navegación de diez horas y puede ser controlado a control remoto, ya que cuenta con sistemas mecánicos, eléctricos y electrónicos para su funcionamiento.

“Tenía un sistema que servía como boya para establecer su posicionamiento o flotador para mantenerse en la superficie. Los cálculos iniciales apuntan a que el artefacto tiene una capacidad para transportar 250 kilogramos de cocaína”, explicó el coronel Carlos Mario Díaz, comandante de la segunda Brigada de la Infantería de Marina en Chocó.

Junto al torpedo la Armada incautó también una lancha con matrícula ecuatoriana y todo indica que ambos aparatos estaban listos para ser embalados con el alcaloide.

Toda la operación se hizo en el estero Santa Bárbara del municipio Litoral de San Juan, Chocó, y de acuerdo con investigadores de la Armada, tanto los tres campamentos como la lancha y el torpedo, pertenecían a un grupo disidente de los Rastrojos que en esa zona se hacen llamar los Gaitanistas.

Este año la Armada ya incautó tres semisumergibles de la mafia en aguas del Pacífico, pero con el hallazgo del torpedo, no hay duda que sus operaciones de control y vigilancia tendrán que ser más severas, porque ahora los narcotraficantes manejan sus cargamentos a control remoto.