ACUSACIÓN
Le llegó la hora a Jorge Pretelt
El magistrado se presentó ante su juez natural para entregar su versión sobre la presunta solicitud de 500 millones al abogado Víctor Pacheco.
Después de dos prórrogas de una esperada diligencia, este jueves el magistrado de la Corte Constitucional Jorge Pretelt se presentó ante su juez natural, la Comisión de Acusaciones. Llegó cumplido a la cita y acompañado de su abogado, Abelardo de la Espriella, para entregar un testimonio que el país espera.
Allí deberá, de una vez por todas, entregar sus explicaciones sobre el
tema que lo ronda desde hace varias semanas y que lo puso contra la
pared: la presunta solicitud de 500 millones de pesos que le hizo al
abogado de Fidupetrol, Víctor Pacheco, para acompañar una tutela en ese
tribunal que favorecería a esa firma.
Pretelt pidió aplazamiento hace pocos días tras considerar que en ese
tribunal no tenía garantías. Según el magistrado, la permanencia allí de
Juan Pablo Duque como secretario general de esa Comisión y quien
trabajó con el fiscal Eduardo Montealegre, lo ponía en desventaja.
También recusó a la representante Angélica Lozano, integrante de esa
célula legislativa, por considerar que ella, por ser activista de la
comunidad LGBTI, estaba impedida para conocer su caso puesto que él votó
en contra el fallo relacionado con la adopción por parejas del mismo
sexo.
El presidente de la Comisión, Julián Bedoya, resolvió el tema. En el
caso de la representante Lozano, aseguró que ella no era representante
investigadora de este caso y que no ha tenido relación con el mismo.
Sobre Duque, el congresista aseguró que, por ser secretario de la
Comisión, no tenía funciones jurisdiccionales sino administrativas.
Despejado el camino, ahora no hay más excusas para entregar su versión y
aclarar el escandaloso episodio sobre la presunta solicitud del dinero.
Pretelt, quizá, va con algo de ganancia a esta indagatoria porque su
acusador, el abogado Pacheco, dijo en una declaración ante la Comisión
que él no tenía pruebas para sustentar su dicho.
Así se desprende de una declaración revelada por Semana.com. En ese
testimonio el jurista indicó que todo cuanto le reveló al magistrado
Gabriel Eduardo Mendoza sobre Pretelt y la presunta solicitud de dinero
fue de manera informal y que sobre el tema no tenía pruebas. Esa charla es la que quedó consignada en una grabación y que ha servido de prueba
para que la Fiscalía investigue a los protagonistas de esta historia.
El abogado dijo que luego de haberle confesado a Mendoza el tema en
Barranquilla, este le pidió que viajara a Bogotá para que les contara a
otros magistrados sobre el episodio con Pretelt. Pacheco dijo que viajó a
Bogotá y conversó con el magistrado Luis Ernesto Vargas de manera
informal sobre el tema y que le resaltó no tener pruebas para comprobar
su dicho.
“Oh sorpresa que me llevé cuando el doctor Vargas grabó esa
conversación, que a mi parecer constituye el recaudo de una prueba
perfectamente ilegal y nula en pleno derecho”, dijo Pacheco.
Dijo que tras esa conversación concretó una cita con el magistrado
Mauricio González en Cartagena, a quien también le narró la historia de
lo sucedido con Pretelt. A él también -según dijo- le ratificó que no
tenía pruebas. “González me dijo: ‘¿Tú estarías en condición de decir
esto, lo que me acabas de decir, de frente a Pretelt de manera informal?’
Le respondí que sí pero que no tenía pruebas. Él me dijo ‘tranquilo, yo
me encargo de amainar los ímpetus de Jorge Pretelt’”.
Pacheco aseguró en este testimonio que él no actuaba como denunciante y
que no podría hacerlo por la “sencilla razón” de no tener elementos
contundentes para hacerlo, con lo que podría caer en una denuncia temeraria. (Vea la declaración completa)
Aun así, Pretelt deberá exigirse a fondo para demostrar su inocencia en
un caso que lo ha puesto en la picota y que llevó a que el alto gobierno
y sus compañeros de la Corte le pidieran la renuncia. Él sacó las
espuelas y comenzó a encender un ventilador cuyos aires tocaron a
algunos magistrados que han tenido conductas, según él, poco
transparentes. Eso lo blindó por ahora, a tal punto que sus compañeros
ya no lo atacan como en un principio. Al mismo tiempo, Pretelt presentó
ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) una solicitud
de medidas de protección y una vigilancia especial al debido proceso.