NACIÓN

La ‘Gata’ pierde (por ahora) el juego del chance

Sucre declaró desierta la licitación que Enilse López creía ya ganada. Ahora espera obtenerla de manera directa.

13 de agosto de 2013
| Foto: SEMANA

Un antiguo refrán español dice: “En martes, ni te cases, ni te embarques, ni de tu casa te apartes”. Si así es, creen los supersticiosos, la suerte empieza a cambiar drásticamente y para mal. Pues eso le paso este día a Enilse López Romero, la ‘Gata’, quien estaba absolutamente convencida de que se iba a ganar la administración del juego del chance en Sucre. Sin embargo, el departamento declaró desierta la licitación.

Hay, sin embargo, algunos más pesimistas que creen que ahora si se viene lo inevitable. Al declararla desierta y como las entidades deben hacer que el servicio se preste no hay otra solución que entregarla a dedo, una adjudicación desierta, y oh sorpresa en el horizonte puede que la empresa beneficiaria sea Aposucre, casa de apuestas de la polémica empresaria.

Pero si no es así y el Gobierno Nacional logra sacarla del juego, la suerte de La Gata se verá opaca. Sería el inicio del fin de un emporio económico, político y social basado en las apuestas legales que, a su vez, ha estado rodeado de alianzas criminales e injerencia impropia en negocios de la salud y de la educación en cuatro departamentos del Caribe.

Por eso, en las últimas horas la tensión se sintió en Sucre y en algunas ciudades costeñas: en estas horas el gobierno departamental de Julio Guerra Tulena debía adjudicar la licitación del chance en medio de advertencias de la Secretaría de Transparencia de la Presidencia de la República sobre presuntas irregularidades en esa licitación.

Se temía que el proceso terminaría por favorecer a la firma Aposucre, en manos de la ‘Gata’ -le dicen así porque su primer negocio se llamaba Apuestas El Gato- pese a sus líos judiciales. Enilse está condenada a nueve años de cárcel por el homicidio del vigilante del peaje vial de El Carmen de Bolívar, condena que cumple con beneficios judiciales en sus casas de Barranquilla, Cartagena o Magangué. Se salvó de las rejas porque argumentó su mal estado de salud.

Pero no es el único socio de la empresa de apuestas con problemas. A Jorge Luis Alfonso López, exalcalde de Magangué e hijo de la ‘Gata’, lo acusan de haber ordenado el asesinato del periodista Rafael Prins Velásquez, sucedido 19 de febrero del 2005 a orillas del Magdalena. Y quien era férreo crítico de la gestión de López. El exalcalde hoy responde en juicio por ese homicidio.

Otra advertencia que hace la Secretaría de Transparencia es que senador Héctor Julio Alfonso López, elegido en las pasadas elecciones por el PIN, es otro accionista de Aposucre, hecho que lo inhabilita para ser elegido y que, constitucionalmente, le genera incompatibilidades para el ejercicio del cargo. La norma señala que los senadores y representantes no pueden contratar por sí mismos ni por interpuesta persona.

Por ello ya fue presentada una demanda de pérdida de investidura ante el Consejo de Estado, que ya fue admitida. De mantenerse la jurisprudencia, muy probablemente el ‘Gatico’, hijo menor de la ‘Gata’, perderá su credencial. Cuando desde Presidencia objetó la licitación, Enilse López mandó decir que le pidieran la curul a ella, en el entendido de que es de su propiedad.

El compromiso de Guerra Tulena

En Sucre, las últimas elecciones a gobernador han estado rodeadas de alianzas con grupos armados ilegales, financiaciones cuestionadas o resultados fraudulentos. Un apagón en el conteo de votos en 2007 fue el preludio de la victoria de Jorge Barraza ante Julio Guerra Tulena, el actual gobernador.

Así pasó también en las victorias de Jorge Anaya y Salvador Arana, ambos de la cuerda política del exsenador Álvaro García Romero, apoyados por las autodefensas. Todos fueron condenados por los delitos de concierto para delinquir y, además en el caso del exlegislador, por masacres y desplazamientos.

Ya para 2011 aspiraban al Palacio Departamental cuatro candidatos. El ganador fue Julio Guerra Tulena, liberal, exrepresentante a la Cámara, expresidente del Senado y miembro de una familia en la que su hermano José y su sobrino Joselito fueron senadores, hoy su sobrino Antonio es senador y su sobrina María del Rosario fue ministra del gobierno de Álvaro Uribe.

Fue su contrincante Héctor Hernández Manotas, candidato de Álvaro García Romero y su hermana Teresita, actual senadora por el PIN. También participó Ramón Emiro Muskus, apoyado por Salvador Arana, Yahir Acuña, actual representante a la Cámara, y, presumiblemente, la ‘Gata’. Gustavo Montes cierra la lista, ha aspirado en varias ocasiones pero su nombre no ha cuajado.

La candidatura de Julio Guerra Tulena surgió después de una reunión en la finca de su sobrino Joselito a la que asistieron Julio Guerra y Felipe Villegas, entonces precandidato. Una semana después de esa reunión, Guerra aceptó ser candidato y encabezar una gran alianza de varios sectores –incluido el obispo Nel Beltrán- para derrotar a los García Romero, que habían impuesto una hegemonía de más de dos décadas.

Ante semejante competencia el primero en irse fue Hernández Manotas, abogado con una vida dedicada al poder judicial, quien se retiró ante el supuesto pacto entre García Romero y la ‘Gata’ que incluía puestos y contratos. Dicen en Sincelejo que el candidato prefirió retirarse antes de comprometerse con ese tipo de pactos.

Muskus siguió en campaña, pero no por mucho tiempo. Sus patrocinadores lo llamaron para decirle que se retirara porque, ante la alianza, no había posibilidades de ganar las elecciones. El aspirante dijo que iría hasta el final. Pero la noche del 3 de octubre, Jorge Abisambra, el entonces hombre de confianza de Jorge Luis Alfonso y Enilse López, fue a su casa y lo amenazó. Dicen que hasta un revólver le pusieron en la boca para que firmara su renuncia.

Lo que se dice hoy es que el retiro de Muskus fue pactado con Guerra Tulena y a cambio este le otorgaría la licitación del chancea la ‘Gata’. El entonces candidato dijo que no haría alianzas con los socios del negocio del chance y, específicamente, con Enilce López. Expresó que sería un agravio para Sucre que alguien con intereses en la concesión de las apuestas tenga candidato propio: “Esa gente viene a arrasar con todo, se van a llevar las arcas del departamento”, afirmó.

Hoy el gobernador no ha sido explícito en afirmar o negar si tiene un acuerdo para que Enilse López y sus hijos conserven el millonario negocio. Y es que la habilidad de la ‘Gata’ es proverbial. En los años 90 en Sucre había varias casas de apuestas o chance y, cuando se legalizó el negocio, la empresaria les pidió que se unieran y así se hizo en varios departamentos. Pero después sacó a los socios de sus negocios o dejó unos pocos.

Si en Sucre le dicen que no, se abrirá la puerta para que los otros departamentos hagan lo mismo, pues con una Enilse López debilitada y presa, perder la licitación del chance sería el inicio del fin de un imperio político, económico, social y hasta armado -según algunos-, que ya tiene más de dos décadas de presencia en el Caribe.

Por ahora, La Gata se enteró de que la licitación fue declarada desierta pero ella tiene fe en que se la pueden dar de manera directa. Entre tanto, se escucha el eco de la canción en la voz de Héctor Lavoe: “Pronto llegará, El día de mi suerte…”