La pelea entre el hijo del presidente y Alfredo Rangel

El analista Alfredo Rangel es una de las personas mejor informadas del mundo militar. Por eso, cada opinión suya tiene una alta valoración en estamento castrense. Ahora, sin embargo, libra una batalla con un soldado, y no con cualquiera, sino con Esteban Santos, el hijo del presidente de la República, Juan Manuel Santos Calderón.

En efecto, Rangel escribió en su perfil de Twitter: “Humillados y ofendidos 40 soldados de elite piden la baja por farsa del hijo del presidente en desfile militar del 20 de Julio”. Se refería al hecho de que el joven que participó en este evento fue saludado por su padre.

De inmediato, Rangel fue desmentido por Esteban Santos, quien también desde su cuenta de Twitter le dijo: “Señor @AlRangelS, como analista/columnista Ud. debería hablar con la verdad y eso es falso. Es un honor prestar el servicio, favor rectifique: Esteban Santos.”

En defensa de Esteban salió también el general Sergio Mantilla, comandante del Ejército, quien en la misma red social escribió de manera categórica: “No es cierta la información en redes sociales de solicitudes de bajas”.

Pero ¿a qué información se refería el alto oficial? En internet circula el siguiente mensaje: “36 Comandos del batallón de Fuerzas especiales del Ejército entre oficiales, suboficiales y soldados profesionales decidieron de manera conjunta solicitar el retiro de la fuerza por honor. Así lo manifestaron los uniformados quien se vieron humillados y vulnerados cuando altos mandos de las FF. MM. los obligaran a formar a la izquierda del hijo del presidente, quien presta su servicio como soldado bachiller. ¡El soldado de mentiras, el hijo del presidente Santos, qué farsa! No todo el que se pone un uniforme es soldado”.

Esta información es similar a la que difundió Rangel, aunque este no habla de 36 militares sino de 40.

El desfile

Esteban Santos participó en el tradicional desfile conmemorativo del Día de la Independencia de Colombia, que este año se celebró en Bogotá y el que se rindió homenaje a los veteranos que participaron en contiendas internacionales y estuvo acompañado de una exhibición aérea.

En el desfile participaron excombatientes del conflicto con Perú en 1932, de la guerra de Corea (1950-1953), de la crisis de Suez (1956) y del batallón que hizo parte de la fuerza de paz en Sinaí en 1979.

Los veteranos desfilaron con sus uniformes y lo hicieron a pie, en sillas de ruedas e incluso a bordo de vehículos de las Fuerzas Militares, dada la edad de los exmilitares, en ocasiones casi centenarios.

También los militares y policías en retiro que han librado el largo conflicto armado interno durante casi medio siglo marcharon entre las calles 26 y 80, saludaron al presidente y a su familia y al gabinete de ministros, quienes ocupaban el palco principal.

Les siguieron los integrantes de las Fuerzas Militares y de la Policía Nacional heridos o lesionados en combate, muchos de ellos mutilados por las minas antipersonal sembradas por las guerrillas en las regiones de conflicto.

En pleno desfile, Santos y su esposa, María Clemencia Rodríguez, rompieron el protocolo al acercarse a su hijo menor, Esteban, quien formaba como lancero, un cuerpo de elite en el que se graduó el año pasado.

Al tiempo, unas 117 aeronaves de ala fija y rotatoria pasaron revista aérea y surcaron los cielos bogotanos. Helicópteros Black Hawk surcaron el cielo bogotano en una demostración de operaciones de rescate de personal, con militares colgando y portando banderas colombianas, junto con aviones Boeing 767, Boeing 727, T-37, A-37, Cessna 560, Súper Tucanos, Ov10 y Hércules, en una demostración de la dotación de equipos.

El número de participantes en el desfile ascendió a unos 12.000 hombres y mujeres, entre los que también hubo miembros de las escuelas de formación, de grupos antiexplosivos y antinarcóticos, de búsqueda y rescate y de paracaidistas.
El vistoso desfile fue recogido por los medios debido a las espectaculares imágenes que allí se produjeron y también se destacó el encuentro entre el presidente y su hijo.

Hay que anotar que Rangel es columnista de Semana.com. En el portal, como en todos los medios de Publicaciones Semana, cada columnista expresa sus puntos de vista y sus opiniones de manera personal y con absoluta libertad.