LAS DOS CARAS DE LA VERDAD
Emboscada guerrillera a convoy militar pone nuevamente en tela de juicio a la UP
"Esos tipos de la UP están aprovechando la tal tregua para poder actuar a sus anchas". "Son unos criminales actuando bajo la bendición del gobierno". "Siempre han engañado al gobierno, pero los comunistas son por naturaleza asesinos". Expresiones como estas debieron salir de los labios de más de un militar colombiano el pasado viernes 16 de mayo. Y con razón. De acuerdo con las primeras informaciones que soltó la XIV Brigada del Ejército en Medellín, fue el IV Frente de las FARC el que protagonizó una emboscada contra un convoy militar en el Alto La Brava, corregimiento del municipio de Remedios, Antioquia, en la cual fueron brutalmente asesinados 8 militares, entre ellos algunos suboficiales, y el conductor del camión en que se movilizaban. Además resultaron heridos por lo menos otros 20 militares.
Pero del otro bando de la opinión, si es que así se puede calificar, nadie podía creerlo. "Eso no pudo haber sido obra de las FARC". "El Ejército aprovecha cualquier cosa para enlodar a la UP". "Si fueron las FARC debió ser defendiéndose de algún hostigamiento militar", debieron apresurarse a decir aquellos que confían más en las informaciones del periódico Voz, que en los comunicados emitidos por el Ejército.
El resto de colombianos, los que no le creen a pie juntillas ni a los militares, ni a los guerrilleros, quedaron en babia y prefirieron esperar a que se desarrollen los acontecimientos a ver cuál era la verdad verdadera.
SEMANA pudo averiguar que los hechos son en sí mismos contradictorios. El grupo guerrillero que asaltó al camión militar gritaba vivas al IV Frente de las FARC, según relato de los propios soldados, pero inundó las paredes de la población de Remedios, con leyendas alusivas al ELN. El Ejército de Liberación Nacional, al igual que las FARC, tiene su esfera de influencia en la región. Sin embargo, quien ha estado golpeando durante los últimos meses es el ELN (actitud que entre otras cosas parece que ha suscitado enfrentamientos con las FARC, las cuales aseguran que son ellas las que salen perjudicadas cada vez que los "elenos" dan un golpe), organización que se declaró desde un principio enemiga de la tregua y que ha reprochado siempre la actitud "entreguista" de las FARC. Y por otro lado, si se juzga por los resultados prácticos de una acción como esta, en la que de haber sido las FARC las atacantes lo único que sacarían en limpio sería el repudio de un sector de población en la que tienen bastante cifradas sus esperanzas electorales. En Segovia y Remedios en efecto, los concejos municipales quedaron prácticamente en manos de la UP. De 10 concejales tiene seis en cada una de las dos poblaciones.
Las FARC, por medio de Iván Márquez, de la ayudantía de su estado mayor, niegan su participación en el asalto, y aseguran que los militares culpan a la UP con el propósito deliberado de afectar la votación que tendrán en las próximas elecciones. Esta apreciación es compartida por el periódico Voz, del Partido Comunista; en su número del 15 de mayo denuncia una actitud "revanchista" contra la votación de la UP, segun la cual los militares han aumentado las ofensivas en las zonas en donde a ésta le fue bien electoralmente y "le están cobrando al campesinado el haber votado por la UP".
En medio del espectáculo de la guerra de la desinformación y de las acusaciones mutuas, lo que no queda muy claro es quién está tratando de afectar la votación de la UP. Si los militares al acusarlos de estas acciones armadas, o los del ELN que gritan vivas a los frentes de las FARC, mientras hacen sus propios asaltos. Mientras tanto, para la franja de opinión que no se ha querido inscribir entre los filo-mamertos, ni entre los filo-militaristas, la verdad por ahora no la tiene por lo menos ninguno de los dos bandos.--