CRISIS BINACIONAL

“Uribe, el más grande anticolombiano que ha existido”

El mandatario venezolano, Nicolás Maduro, se fue en contra del expresidente. Dijo: el "paramilitarismo colombiano" azota a su país.

24 de agosto de 2015
| Foto: Archivo SEMANA

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, apareció ante las cámaras de televisión tras la crisis humanitaria en la frontera con Colombia. Desde el sábado más de mil colombianos han sido deportados, denuncian mal trato por parte de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) y varios padres han tenido que separarse de sus hijos. La tensión en la frontera ha hecho percibir un ambiente de xenofobia. Maduro, en una alocución, negó que sea enemigo de Colombia. "No soy anticolombiano, soy antiparaco".

Maduro justificó las recientes determinaciones adoptadas por su gobierno para enfrentar la inseguridad en la frontera, que según el mandatario se ha convertido en "una dictadura terrorista" de los paramilitares y las bandas criminales de Colombia. "Denunciar el paramilitarismo no es atacar al pueblo colombiano. Lo amamos porque es noble y trabajador (...) A esta hora me están viendo más de cinco millones de colombianos en sus casas, en Venezuela, donde sus hijos sí han podido estudiar".

Al denunciar un sinnúmero de hechos criminales atribuidos a los paramilitares, Maduro le lanzó los más duros adjetivos al expresidente Álvaro Uribe, a quien calificó con expresiones como "asesino", "narcotraficante" y hasta "cómplice de muchos asesinatos". Incluso lo señaló de ser quien articula el crimen en la frontera.

Para Maduro, los anticolombianos son los "paramilitares" y las "bandas criminales". Por eso se atrevió a decir: "Álvaro Uribe es el mayor anticolombiano de la historia. (....) Más temprano que tarde la justicia internacional le hará pagar sus crímenes".

Horas antes del pronunciamiento, el expresidente Uribe había aterrizado en Cúcuta para hacer presencia en la frontera. Esa sorpresiva visita, que el Gobierno había calificado de "desesperada", motivó la fuerte reacción del presidente venezolano contra el exmandatario colombiano.  

Maduro también justificó las acciones de militares de la FANB, quienes de forma arbitraria están sacando a los colombianos de sus casas en San Antonio del Táchira y además marcándolas con las letras D (demoler) y R (Revisar).

Según él, con esas revisiones la FANB ha logrado incautar materiales de paramilitares y también han capturado a 10 personas que, según él, pertenecen a la estructura delincuencial que opera en la frontera y que fue presuntamente la que atacó a los tres militares venezolanos el pasado miércoles.

Maduro llamó 'invasión' a este municipio en el que el 70 % de sus habitantes son colombianos y aseguró que allí se encontraba una base paramilitar. "Tenían todo instalado en un rancho. Había un burdel donde practicaban explotación sexual y había, incluso, un experto en explosivos", dijo.

De acuerdo con las cifras del presidente del país vecino, en los últimos seis años han "capturado cerca de 100 capos de la droga colombiana en Venezuela". Agregó que en los próximos días entregarán más de 30 nuevos jefes del narcotráfico que han sido detenidos.

Basó sus duras acusaciones al supuesto paramilitarismo colombiano en los casos de Lorent Saleh, un venezolano que supuestamente conspiraba contra el gobierno de Maduro desde Colombia, y en el asesinato del diputado chavista Robert Serra, quien -según el gobernante- fue asesinado por alias el 'Colombia', un presunto paramilitar.

"Todos los caminos de estos asesinatos conducen a la derecha. Álvaro Uribe es un gran aliado de la derecha venezolana", dijo Maduro, quien añadió que las investigaciones de la Policía bolivariana indican que los autores de estos homicidios fueron paramilitares. Para él, la forma como mataron a Serra fue con métodos similares a los que usan las bandas criminales del país.

"Hay métodos y cursos que estos paramilitares reciben durante meses para el asesinato silencioso. Quienes los entrenan vienen de Colombia".

Por último, el mandatario hizo una advertencia: "Que cesen ya las conspiraciones de Colombia. Yo pido respeto. Aquí en Venezuela nadie conspira contra el presidente Santos, y si eso pasara, yo lo metería preso. Nosotros no nos metemos con ustedes. Ha llegado la hora del respeto, pues no voy a tolerar esta situación ni un tantito más (...) No saben de qué somos capaces los bolivarianos", sentenció.