ELECCIONES 2018
"En 2018 cualquier resultado es posible": Piedad Córdoba
La exsenadora se lanza a la presidencia. En entrevista con SEMANA, habla de cómo ve el panorama electoral, la izquierda colombiana, las coaliciones y a sus competidores.
SEMANA: ¿Cómo será su estrategia para llegar a la Presidencia?
Piedad Córdoba: Mi estrategia es muy sencilla: poner el oído en las preocupaciones de la gente y hacer de todas esas inquietudes y anhelos un proyecto de gobierno serio y al servicio de todos. Conozco el país. He escuchado y dialogado con muchísimas personas en este tiempo, compartiendo las realidades que viven nuestras mujeres, nuestros profesionales, nuestros niños, nuestros desempleados, los jóvenes... Ahora es el momento de una propuesta conjunta y por fuera de las estructuras partidarias tradicionales que tanto han contribuido a la situación crítica que vivimos hoy. La Colombia real tiene la oportunidad de expresarse, de hacerse oír, de conseguir transformar el país de los pocos beneficiados que nos miran desde arriba en un país de todos.
SEMANA: ¿En su proyecto base acogerá a las Farc?
P.C: Mi proyecto está compuesto por ciudadanos y ciudadanas que dijeron basta a las injusticias y que quieren un cambio, y está destinado a ellos. Se trata de un proyecto centrado en la necesidad de dar respuestas concretas y de largo alcance a los problemas reales que padece la mayor parte de la población. Hay una Colombia real que no está siendo contemplada, escuchada ni representada por la clase política que conforma la Colombia oficial. Esa Colombia real ve indignada como un 1% de la población concentra el 20% de la riqueza nacional; es la Colombia real en la que 6 de cada 10 trabajadores gana menos de 240 dólares al día; es la Colombia real con casi 9 millones de personas por debajo del umbral de la pobreza; es la Colombia en la que son más las personas que no votan que las que votan. Pero eso está llegando a su fin. Por primera vez en décadas, la gente va a poder votar con ilusión, con la convicción de que esta vez, su voto sí va a servir para cambiar las cosas.
SEMANA: Algunos jefes guerrilleros han dejado ver su interés para hacer una alianza con usted, ¿qué opina?
P.C: La decisión de presentarme por fuera del establecimiento político y seguir el mecanismo de recolección de firmas se basa justamente en la convicción de que estamos a las puertas de un nuevo tiempo para Colombia, un tiempo nuevo donde las y los ciudadanos de a pie van a levantar su voz para devolverle a todos los colombianos honestos el país que se merecen.
SEMANA: ¿Qué temas va a tratar en su campaña?
P.C: El hartazgo de la gente ya es incontenible. Siete de cada diez colombianos tiene una opinión tremendamente negativa sobre el presidente Santos y su Gobierno. El 85% cree que no está haciendo nada por el empleo. La percepción sobre la economía es catastrófica. Los colombianos están preocupados por sus trabajos, escasos y mal pagados; por un sistema de salud insuficiente; por la falta de una educación de calidad y para todos; por los lacerantes casos de corrupción de la casta política. Nuestros jóvenes no encuentran empleos dignos y acordes a su capacitación. Las mujeres siguen cobrando menos que los hombres por el mismo trabajo y no acceden a puestos de responsabilidad. De esto es de lo que tenemos que empezar a hablar todos los políticos y no como sucede hasta ahora con las elites que nos gobiernan, que tienen secuestrada la política desde hace décadas, y que prefieren hablar de lo que ocurre en otros países, en un intento cada vez más fracasado de desviar la atención de los gravísimos problemas que tenemos aquí.
SEMANA: ¿Cree fácil pasar a la segunda vuelta sin hacer coalición?
P.C: Mi coalición es con la gente, con el pueblo. Creo que los colombianos están ya hartos de esa política donde todo se negocia en los despachos y en base a cuotas de poder. Por eso, el proyecto que estamos levantando es con la gente, desde la gente y para la gente.
SEMANA: ¿Por qué cree que Claudia López, Robledo, Fajardo y Navarro no la han llamado para estar en esa coalición?
P.C: Le reitero que no ando pendiente de este tipo de coaliciones. Ahora mismo estamos volcados en recorrer el país, escuchar a la gente y sus demandas y nutrir un movimiento que no hace más que crecer cada día. El cambio avanza como un tsunami incontenible. Aquellos que sigan anclados en las viejas estrategemas políticas de despachos y pasillos serán arrasados por esa ola gigantesca. En Colombia llegó la hora de la gente, no de los políticos.
SEMANA: ¿Cree que quieren reducirla políticamente?
P.C: De verdad que no me preocupan lo más mínimo las tácticas políticas de otros candidatos. Pero lo importante no es que preocupen o dejen de preocupar a Piedad Córdoba. Lo realmente importante es que a la gente dejó de preocuparle estos juegos de tronos, este intercambio de nombres y cargos que se negocian a puerta cerrada. Estoy haciendo algo que ningún otro candidato o candidata hace: recorrer el país de punta a punta para escuchar a la gente. Y le aseguro que lo que la gente siente dista mucho del discurso de la Colombia oficial de la casta política.
SEMANA: ¿La frase de la izquierda unida jamás será vencida nunca se hará realidad? Se lo pregunto por qué se ve a Petro por un lado, usted por otro y el grupo de Robledo por otro lado...
P.C: El eje izquierda-derecha ya no sirve para explicar los problemas de la Colombia de hoy. Esas etiquetas ya no sirven para explicarle a la gran mayoría de los colombianos por qué sus salarios no les alcanzan para llegar a fin de mes, sus jornadas laborales cada vez son más largas y sus condiciones contractuales se han ido precarizando. Izquierda o derecha no le dice nada a esos millones de personas que pueden haber votado en un sentido u otro en el pasado, pero sienten la misma rabia e indignación cuando ven todos esos casos de corrupción en los que se encuentra sumida toda la elite política que hoy gobierna. La gente lo que siente, es que los de arriba, que son menos, se están enriqueciendo a costa de los de abajo, que son más.
SEMANA: ¿Qué temas estarán en la campaña 2018?
P.C: Probablemente muchos candidatos de la vieja política van a intentar distraer la atención de los graves problemas de Colombia y ocultar su falta de propuestas aludiendo a lo que ocurre en otros países y utilizando la descalificación y la pelea sucia. Yo no voy a entrar en ese juego. Además, la gente va a castigar a quienes sigan utilizando esas tácticas, propias de ese viejo tiempo político que ya está desapareciendo. Yo voy a hablar de lo que le interesa a los colombianos, siempre sin descalificar a nadie y sin entrar en esa guerra sucia.
SEMANA: ¿Qué siente por el candidato Alejandro Ordóñez después de las decisiones en su contra?
P.C: No hay ningún tipo de animadversión personal. Es un asunto de justicia, verdad y, sobre todo, de plantarse ante cualquier intento de estigmatizar a quien piense diferente. Durante décadas, la estrategia de las élites políticas ha sido la de la criminalización del adversario político. Eso tiene que acabar. En la nueva Colombia que viene, las diferencias deben confrontar a través del debate y la argumentación, nunca más criminalizando y persiguiendo a los adversarios.
SEMANA: Cómo ve la Campaña electoral hasta ahora. ¿Qué opina de las encuestas en la que el 60% de los encuestados dicen que votarán por el candidato que ponga Uribe?
P.C: Queda cerca de un año para las elecciones. Ninguna encuesta puede vaticinar ahora mismo lo que ocurrirá en mayo de 2018, y menos cuando ni siquiera se conoce el nombre de todos los candidatos. Pero lo que sí creo que está en la mente de todos es que se trata de los comicios más abiertos de nuestra historia reciente. Cualquier resultado es posible. Y esta apertura del campo de lo posible se da, precisamente, por esa demanda de cambio de la que le hablaba antes. El voto ya no pertenece a este o aquel partido. Ya no cabe hablar de votos cautivos. Ante el anhelo de un nuevo rumbo, el elector dará su confianza a aquella opción que mejor sepa encarnar este nuevo tiempo que se avecina.
SEMANA: Usted ha dicho que lo del procurador fue una persecución de diferentes sectores políticos. ¿Teme que la sigan persiguiendo?
P.C: Fui secuestrada, mi familia y yo sufrimos el amargor del exilio, padecí atentados, no hay día en el que no me amenacen de una forma u otra, me despojaron de mi curul senatorial de una forma ilegítima e ilegal como después se demostró. Y a pesar de todo eso, los colombianos siempre me vieron a su lado. No me recluí en mi casa, que es lo que esa casta política quería. Todo lo contario. Los sufrimientos fortalecieron mi determinación de luchar por mí país. Amo Colombia. Soy colombiana por los cuatro costados. Pienso como colombiana, siento como colombiana, lloro y río como colombiana, sufro y gozo como colombiana. Es este amor tan grande por Colombia el que me hace perseverar en mi tarea a pesar de todos los obstáculos que me quieran poner. En mayo de 2018 tenemos una cita electoral muy importante, pero lo fundamental es pensar en cómo construir la Colombia que tenemos a partir del día después.