Se complica la situación de Piedad Zuccardi

La Corte Suprema de Justicia tomó este lunes una trascendental decisión en el tema de la parapolítica: llamó a juicio a la exsenadora Piedad Zuccardi por presunto concierto para delinquir agravado, esto asociado a sus supuestos vínculos con paramilitares.

La exsenadora se encuentra detenida en el Centro de Estudios Superiores de la Policía (Cespo) y estaba a la espera de que el Alto Tribunal le definiera su situación jurídica.

¿Cómo es la historia? La investigación en contra de Zuccardi se derivó de declaraciones de varios paramilitares que fueron incluidos en el proceso contra el también barón electoral Javier Cáceres, condenado por parapolítica. Una de esas declaraciones es la de Manuel Antonio Castellanos, alias ‘Chino’, un paramilitar desmovilizado que en 1999 militó en el bloque Montes de María.

En marzo de 2009 Castellanos les dio a los magistrados detalles de una reunión celebrada en Ñanguma, jurisdicción de María la Baja, Bolívar, donde tanto Cáceres y otros políticos tuvieron sus primeros acercamientos con el jefe paramilitar Úber Banquéz Martínez, alias ‘Juancho Dique’.

Castellanos dijo que en el año 2002 o 2003 se produjo una reunión en una tienda de propiedad de ‘Juancho Dique’, a la que asistieron el esposo de Piedad Zuccardi, Juan José García, el senador Javier Cáceres, el gerente de la Corporación Autónoma del Canal del Dique (Cardique) y los paramilitares Pedro Abelardo López Redondo, alias ‘Peter’ y Luis Fernando Sánchez, alias ‘El Profe’ donde hablaron entre otras cosas, de contratos de vías y de salud.

Tiempo después, el 12 de agosto de 2010, los magistrados volvieron a interrogar a Castellanos. En esa oportunidad se refirió a otra reunión, celebrada meses antes a la campaña al Senado de 2002, en el sitio conocido como ‘Casa Loma’ o ‘Cocina Sabrosa’, en el municipio de Arjona, también en Bolívar.

Según él, ese encuentro sirvió para presentar a Edwar Cobos Téllez, alias ‘Diego Vecino’ como jefe político de las AUC en la región. Dijo que a esa cita habrían asistido el senador Cáceres, Piedad Zuccardi y su esposo, Juan José García, lo mismo que el alcalde del Arenal, Bori Llama, y el alcalde de Arroyohondo, Carlos Manuel Tinoco. “La reunión duró como tres horas, como de nueve de la mañana hasta la una y pico. Ya se había acabado el noticiero. Almorzaron allí”, dijo Castellanos a la Corte.

Esas declaraciones se sumaron a otras que recaudó la Corte y que tuvieron toda la credibilidad de los investigadores. Esta medida de la Corte deja entrever que la parapolítica está más viva que nunca.