NACIÓN
Uribe denuncia a Maduro en Washington
El expresidente lleva a la CIDH los insultos del mandatario venezolano. ¿Servirá de algo?
El fin de semana pasado, el expresidente Álvaro Uribe prometió interponer una denuncia contra el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, porque este, en una sonora alocución, aseguró que Uribe era un "asesino” y tenía “un plan para matarlo”. El recién elegido presidente de los venezolanos denunció además que paramilitares están intentando entrar en su país con ese fin.
“Uribe está detrás de un plan para asesinarme. Uribe es un asesino. Yo ya tengo elementos (probatorios) suficientes de que él está conspirando y hay sectores de la derecha venezolana en comunicación con él para eso”, declaró Maduro.
Segundos más tarde, Uribe calificó el asunto como una inmadurez del mandatario. Pero más adelante, el cuento fue tomando ribetes serios. Este martes Uribe produjo un comunicado en el que aseguraba que esas declaraciones eran el reflejo de una persona desesperada que quería desviar la atención de la “corrupción e ilegalidad que promueve la dictadura que dirige”.
El exmandatario fue más allá y anunció que acudiría a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para solicitar que se tomen medidas cautelares a su favor, ya que las declaraciones de Maduro lo ponían en inminente riesgo.
En Colombia, muchos creyeron que el anuncio de Uribe se quedaría sólo en eso. Pero este martes, el exmandatario envió a su abogado Jaime Granados a Washington para interponer la denuncia.
El jurista entregará un folder con las pruebas contra Nicolás Maduro y expondrá hasta dónde esos señalamientos no solamente son falsos, sino que atentan contra la seguridad de su cliente.
En conversación con Semana.com, el abogado Granados asegura que esta denuncia tiene un valor simbólico de legitimidad jurídica internacional. Y explica que la solicitud que radicará tiene además un elemento adicional, y es solicitarle a la Comisión que conmine al presidente venezolano a que cese las conductas hostiles contra Uribe.
“No hay que olvidar que Maduro, quien representa un Estado, es la persona que está cometiendo acciones contra el exmandatario de los colombianos”, indicó Granados, al tiempo que anunció que solicitará mayor protección para Uribe y su familia.
Un experto en temas internacionales consultado por Semana.com advierte que el alcance de esta denuncia ante ese organismo es incierto, pues ni la Comisión Interamericana ni la Corte Interamericana pueden juzgar individualmente a ciudadanos de un determinado país.
Lo que investiga la Comisión son las conductas de un Estado parte por una posible vulneración de derechos respecto de un tema específico. “Lo que sí puede la Comisión es proferir medidas cautelares, es decir, proteger al denunciante”, explicó el internacionalista consultado, que pidió la reserva de su nombre.
Antes de viajar, Granados anunció que solicitará también a la Procuraduría que promueva una petición especial para que, en caso de que el presidente Maduro ingrese a territorio colombiano, pueda ser investigado por un órgano de justicia imparcial por las calumnias contra Uribe. Pero esa petición no es del todo clara.
Paradójicamente, es en esa misma Comisión donde Uribe tiene varias denuncias en su contra. La más reciente fue la que interpuso el 14 de marzo pasado el representante Iván Cepeda, quien denunció los presuntos nexos del exmandatario con grupos paramilitares.
El congresista entregó pruebas según las cuales la hacienda Guacharacas, ubicada en San Roque (Antioquia), que fue propiedad de la familia Uribe, al parecer se habría convertido en un centro de operaciones de grupos paramilitares.
De esta manera, lo que hasta ahora era un combate verbal en el que las partes eran aplaudidas por seguidores en columnas de opinión, micrófonos y trinos, ahora muy posiblemente pase a manos de un tribunal.