VIOLENCIA
Vuelven rumores de casas de pique en Medellín
Medicina Legal reveló que este año en la capital antioqueña se han encontrado 24 cuerpos desmembrados.
La seguridad en Medellín ha estado al filo últimamente: cada vez aparecen en las redes sociales más videos de atracos a mano armada y linchamientos. Hace algunos meses circularon panfletos de supuestos grupos de autodefensa que sentenciaban una limpieza social.
Sin embargo, la cifra que entregó Medicina Legal denunciando que este año se han encontrado 24 cuerpos desmembrados en la ciudad es una muestra de que en la ciudad las tensiones criminales están al día pese a antiguos pactos de fusil que se declararon hace dos años.
Alejandro*, quien hasta no hace mucho tiempo vivió en el barrio San José la Cima, en la comuna nororiental, dijo que hace poco más de una década empezó una práctica tenebrosa: “Tarde de la noche escuchábamos que en una casa subían la música del equipo de sonido y empezaban a pegarles a las paredes, que algunas eran de lata, para hacer mucho ruido, así no se oían los gritos de las personas que desmembraban ahí”.
Algunos analistas del conflicto urbano creen que las llamadas “casas de pique” fueron una práctica que empezó con el cartel de Medellín y la guerra que libró contra el Estado y los Pepes, aunque se habría impuesto como una táctica para intimidar al enemigo en la avanzada del Bloque Cacique Nutibara de las AUC, a principios de la década pasada.
Fernando Quijano, director de la Corporación para la Paz y el Desarrollo Social (Corpades), aseguró que estas, más que casas de pique, son casas de tortura: “No son como las casas que hay en Buenaventura en las que pican y tiran los cuerpos al mar, acá son de tortura porque aplican asfixia mecánica, a algunos los matan con armas contundentes, a otros a puñal, a otros con tiros, a otros les aplican desmembramiento”.
Según Quijano, hay varias casas identificadas en el Valle de Aburrá: “Existe la casa de las muñecas, en Envigado, cerca de la antigua Catedral; existe la casa de tortura de Caldas, que la llaman el matadero; la ratonera, en Aranjuez; existía una en San Pedro de la Loma, en San Cristóbal; en el centro hay tres o cuatro, en unas picaban a los ladrones; hay otras al lado del río Medellín, como si fueran parqueaderos o bodegas; incluso hay denuncias de que están desapareciendo gente en ladrilleras, los pican y los echan al horno”.
Sobre la información de Medicina Legal, José Jaír Jiménez, secretario encargado de Seguridad, dijo que en el área metropolitana, este año, se han registrado nueve casos de desmembramiento, siete de ellos en Medellín.
“Conocemos esos casos, hay registros. Nosotros no tenemos información oficial de la existencia de esas casas. Sobre la información que nosotros manejamos, nuestra fuente es Medicina Legal, la Fiscalía y la Policía Nacional, seguro hay algún error”, afirmó.
Mientras tanto, el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, ordenó a la Policía investigar el caso para determinar si las tristemente célebres casas de pique existen o no.