Bienes culturales en peligro

La ministra de cultura María Consuelo Araújo, aseguró el día de la presentación oficial de la Lista Roja, que la memoria histórica de la nación se encuentra en peligro, y que es indispensable que tanto las autoridades como el ciudadano común sepa diferenciar el patrimonio cultural de las artesanías que sí se pueden comercializar, para evitar que piezas como las estatuas de San Agustín sean saqueadas hacia los mercados de Estados Unidos y Europa, que son los principales compradores.

En el acto oficial de lanzamiento, que se realizó el martes 9 de marzo en el Museo Nacional, Adelaida Espinoza, presidente del Comité Colombiano del ICOM, junto con la ministra de cultura María Consuelo Araújo, entregaron al personal de la Interpol, de la policía y de la aduana la Lista Roja. Al acto asistieron también Luis Repetto, presidente del Comité para Latinoamérica y el Caribe del ICOM, Daniel Castro, director del Museo Casa 20 de julio de Bogotá, y Elvira Cuervo, directora del Museo Nacional.

Repetto dijo que luego del narcotráfico y de la trata de personas, el tráfico de bienes culturales es el tercer negocio ilegal más rentable del mundo. También hizo énfasis en que el tráfico de estos bienes se realiza por desconocimiento, pues los agentes de aduana, y el personal de la policía detiene estas piezas no para comprobar si pertenecen al patrimonio cultural, sino para evitar que sean utilizadas para transportar drogas.

La Lista Roja de bienes culturales latinoamericanos en peligro, es la tercera en el mundo. África e Irak ocupan los primeros lugares. Allí ya se realizó con éxito la campaña.

Peligro en Latinoamérica

En Colombia, un caso reciente fue el saqueo de la colección completa de objetos litúrgicos de plata del Museo Colonial de Bogotá, que fueron recuperados casi en su totalidad luego de un año, gracias a la acción de la policía.

Otro acto común en el país es el de las grandes piezas de San Agustín que son cortadas en pequeños bloques para sacarlas ilegalmente, hacia los mercados de Estados Unidos, Canadá, Europa y Japón.

Entre tabto, en países como Perú, las leyes no son lo suficientemente efectivas para frenar con el tráfico, y la Iglesia Católica, poseedora de incalculables bienes de valor patrimonial, no cuenta con un inventario actualizado, y tiene abandonados varios de sus monumentos religiosos. Una de las regiones del país inca que ha sido víctima de saqueos, es la costa norte. Si se observa desde una perspectiva aérea, se detecta un paisaje semejante a un campo bombardeado, por los cráteres producidos por el huaqueo, que se ha convertido en una actividad económica para cientos de campesinos.

El gobierno de los Estados Unidos ha dictado normas específicas para impedir el ingreso de objetos arqueológicos de determinados sitios, lo que ha motivado a que los gobiernos firmantes, como en el caso del Perú, también se preocupen por la restitución de su patrimonio.

En la frontera entre Perú y Bolivia, las bandas operan las 24 horas del día. Lo mismo sucede en Guatemala donde los objetos arqueológicos o religiosos salen impunemente.

Para evitar que eso siga pasando, la lista sirve como guía y explica cuáles son las categorías, objetos y legislación que protege a cada uno de los objetos, puede ser consultada en

http://icom.museum/redlist/LatinAmerica/spanish/intro.html