Movilidad

“30 kilómetros de metro es un chiste”

En entrevista con Semana.com, el ex Alcalde Enrique Peñalosa critica a la administración Moreno y al gobierno nacional por el proyecto de metro en Bogotá. Según el ex alcalde, mientras la expansión de Transmilenio está sustentada en estudios, sobre el metro “no hay una sola página escrita”.

Camilo Jiménez, Corresponsal de Semana en Berlín
5 de junio de 2008

Semana.com: Moreno propone el metro y usted se opone. ¿Cúales son sus razones?

Enrique Peñalosa: Es que el metro es una inversión monstruosa y no va a aportar. No tiene mayor capacidad ni mayor alcance ni es más rápido que el Transmilenio. Éste lleva más gente que el 90 por ciento de los metros del mundo y es más rápido que un metro si tiene líneas expresas y no tiene semáforos.
 
Semana.com: Las obras de Transmilenio estaban sofocando a la ciudad. Al proyecto de la Séptima, por ejemplo, se opuso todo el mundo.

Enrique Peñalosa: Vea, hacer la Décima y la Veintiséis y no hacer la Séptima es botar toda la plata que se invirtió, porque la Séptima le da al sistema una continuidad necesaria. El Transmilenio por la Séptima es un proyecto hermoso. Hace parte de la tercera fase de Transmilenio cuya concepción no estuvo en mis manos sino en las de expertos, y fue aprobado con base en estudios. ¿Cuál es el estudio que dice que Transmilenio no se debe hacer en la Séptima? Más bien yo creo que no se quiso molestar a los vecinos de estrato alto.

Semana.com: Pero Uribe ya le dio un espaldarazo necesario al metro.

Enrique Peñalosa: Lo curioso es que el gobierno nacional y distrital se hayan comprometido con el proyecto de inversión más grande de la historia del país, cuando no hay una sola página escrita sobre el tema: no saben dónde va a ser la primera línea. ¿Le parece que es una decisión responsable de inversión?

Semana.com: Pero no habrá dejado de pensar que el presidente Uribe es una persona seria…

Enrique Peñalosa: Estamos hablando de razones políticas, no de razones serias. Al presidente Uribe le oí muchas veces decir que si él hubiera conocido el Transmilenio cuando era alcalde de Medellín no habría hecho el metro. Lo del metro de Bogotá es politiquería clasista y regresiva. Haciéndolo le están quitando recursos a otras necesidades. Se va a necesitar un subsidio de operación de 300 mil millones al año. Con esa plata se podría comprar, por ejemplo, 15.000 hectáreas de tierra en 10 años, un área equivalente a la mitad de Bogotá, lo cual serviría, por ejemplo, para construir una ciudad plana y poder despejar los cerros. Además 30 kilómetros de metro es un chiste, Londres tiene 1800 y no ha logrado acabar con el trancón.

Semana.com: ¿Necesitan los bogotanos pagar más impuestos?

Enrique Peñalosa: Si claro. Lo grave es que aunque se necesitan más recursos, no estoy viendo que se hagan esfuerzos por mejorar la eficiencia. Ni en esta administración ni en la pasada.

Semana.com: ¿Eso qué quiere decir?

Enrique Peñalosa: Que hay un aumento en la burocracia y una reducción tanto en la eficiencia, como en la injerencia política. Un ejemplo es que ahora quieren aumentar la burocracia de las alcaldías locales. Otro es que, aunque la alcaldía de Garzón tuvo muchísimos recursos y un año más que la mía, hizo mucho menos obras. Eso es falta de eficiencia.

Semana.com: ¿Desde que Garzón salió se sabía que se necesitaban más recursos?

Enrique Peñalosa: Por supuesto. Y esa es solo una de las mentiras de Samuel Moreno, que dijo muchas durante toda la campaña.

Semana.com: ¿Qué otras dijo?

Enrique Peñalosa: Dijo que no había que hacer vivienda a las afueras de la ciudad y ahora está haciendo lo opuesto, diciendo que ahí es donde hay que hacer vivienda popular, lo cual era uno de los puntos de mi campaña. Dijo que no iba a vender la ETB, y ahora dice que la va vender. Decía que no iba a cobrar impuestos, y ahora comienza a cobrar. Y hay más.

Semana.com: ¿Entonces no es que el alcalde Moreno hubiera sido algo ingenuo?

Enrique Peñalosa: No, es que ese es el estilo tradicional de muchos políticos en Colombia: decir mentiras. Y a la gente parece que le gusta, porque votan por ellos.

Semana.com: Ahora le critican al alcalde Moreno que quiera cobrar una contribución por el alumbrado público. Él dice que no es un impuesto. Además ya en otras ciudades la gente contribuye al alumbrado. ¿Qué opinión le merece esta medida?

Enrique Peñalosa: Yo fui el que comencé con ese tema. Sólo que el Concejo nunca me lo aprobó. Es algo lógico, una medida necesaria. Se cobra en casi todo el país. Lo que pasa es que hay que cobrar eso como una sobretasa al consumo de energía.
 
Semana.com: ¿Y cómo garantizar los demás recursos?

Enrique Peñalosa: Para el mantenimiento de los parques debería haber una ley que permitiera recargar las tarifas de recolección de basuras para financiarlo. Para la construcción y mantenimiento de la malla vial se necesitan recursos provenientes de los dueños de los carros que usan las vías, por ejemplo, con impuestos más altos a la gasolina y con peajes. Y para los ciudadanos, quiéralo o no el Secretario de Hacienda, eso significa que tendrá que meterse la mano al bolsillo. Como le digo, Moreno es un especialista en mentiras.
 
Semana.com: ¿Está camuflando Moreno una reforma tributaria?

Enrique Peñalosa: Lo claro es que sí se necesita. Le doy un ejemplo muy sencillo. Para mantener las vías en buen estado y subsidiar un medio de transporte público cada vez mejor, hay que cobrar más impuestos a la gasolina. No hay de otra.

Semana.com: Pero con o sin impuestos, Transmilenio sigue lleno.

Enrique Peñalosa: Sí, pero no es por razones técnicas, es por costos. Podría ir mucho menos lleno.

Semana.com: ¿Cómo?

Enrique Peñalosa: Más buses. Y para eso hay que pagarles a los contratistas, que no tienen ingresos suficientes. Por lo cual debería haber un esquema de subsidio no sólo para la inversión sino también para la operación.

Semana.com: ¿Más buses en una ciudad cubierta por la polución? ¿no está dejando de lado el medio ambiente?

Enrique Peñalosa: No. Lo que pasa es que hay que restringir el uso del carro, no sólo por el medio ambiente sino también para evitar que se sigan desarrollando suburbios a las afueras que aumentan la intensidad del consumo de energía y tierra de la ciudad. Pero como Moreno no ha hecho más que decir que los carros son una maravilla.