OPINIÓN
El pastorcito
El beneficio no fue tan casual como quiso presentarlo el Ministro. La compañía fue creada para obtener dinero de los programas estatales.
El gobierno Uribe que ha sobrevivido, sin inmutarse, a numerosos escándalos de corrupción, puede terminar enredado por cuenta de la defensa que ha querido hacer el Ministro de Agricultura del tema Agro Ingreso Seguro. Andrés Fernández ha mostrado arrogancia, escaso conocimiento sobre las ejecutorias de su propio despacho y, lo que es más grave, ha faltado a la verdad frente a hechos que se pueden comprobar con documentos públicos.
Resulta casi cómico ver al Ministro diciendo frente a la prensa: "Ni los Dávila Abondano, ni las otras familias, revisando nosotros las campañas, ha aportado un solo peso a la campaña del presidente Uribe ni la de 2002, ni la de 2006". (Ver video rueda de prensa Minagricultura)
Pues bien, señor Ministro, los documentos de la campaña de Uribe 2002, en manos de las autoridades electorales, demuestran lo contrario. La cabeza del grupo Daabon (Dávila Abondano), el señor Alberto Francisco Dávila Diazgranados, figura entre los aportantes a la campaña de su jefe, de acuerdo con el folio que usted puede ver en semana.com firmado por el propio Álvaro Uribe.(DávilaAporte2002.jpg)
Como si fuera poco, dos empresas del grupo Daabon, llamadas C. I. La Samaria y C. I. Tequendama, entregaron contribuciones de 15 millones de pesos cada una, para la llamada Asociación Colombia Primero, manejada por los mismos promotores del referendo reeleccionista para evadir los topes legales de financiación. (AporteReferendoReeleccionista.jpg)
Muchos otros beneficiarios de la plata regalada por Agro Ingreso Seguro contribuyeron a las campañas de Álvaro Uribe, entre otros, Silvestre Dangond Lacouture, a través de Palmas Oleaginosas de Casacará (Ver comparación1.jpg), y Harold Abadía Campo, familiar del actual gobernador del Valle. (Ver comparación2.jpg)
Pero quizás, el caso más elocuente sea el de Alfredo Lacouture Dangond, aportante de la campaña de Uribe en 2002 (AporteLacouture2002.jpg) y padre de la funcionaria María Claudia Lacouture Pinedo, gerente de Imagen país, que maneja la campaña gubernamental 'Colombia es Pasión'.
El señor Lacouture Dangond junto con su esposa Isabel Mónica Pinedo y tres de sus hijos (Alfredo Luis, Victoria Eugenia y Alberto Mario) han recibido más de 3.000 millones de pesos en subsidios no reembolsables. (AgroIngresoSeguros.Lacouture.jpg)
No es la única familia de funcionario que ha pelechado con los programas del Ministerio de Agricultura.
El ministro Fernández quiso ser habilidoso cuando reveló, reclamándolo como una actitud de transparencia, que el director de la Dian, Néstor Díaz, y el presidente del Fondo Nacional del Ahorro (FNA), Hernando Carvalho, habían recibido un ICR (que consiste en que el Estado paga una parte de un crédito adeudado por los beneficiarios) como accionistas de una sociedad que armaron para sembrar palma africana.
Sin embargo, el beneficio con plata pública no fue tan casual como quiso presentarlo el Ministro. La compañía en la que tienen intereses el director de la Dian y el presidente del FNA, fue creada con el propósito de obtener dinero de los programas estatales.
En la escritura de constitución, protocolizada en febrero de 2007 en una notaría del modesto barrio Las Ferias de Bogotá, aparece como primer punto de la cláusula que define el objeto de la sociedad lo siguiente: "Podrá acceder y solicitar incentivos agrícolas tales como: ICR, CIF y/o incentivos y mecanismos financieros que modifiquen, complementen, mejoren o sustituyan los anteriores". (ObjetoSociedad.jpg)
Curiosamente, los transparentes funcionarios no aparecen con nombre propio en la junta directiva de la compañía. En contraste con los demás socios, que figuran con nombres y apellidos completos, en donde debería ir la esposa de Hernando Carvalho, la escritura solo dice "Representante legal de Abago S. A.". (Abago.jpg)
En el espacio en el que debería aparecer el nombre de Néstor Díaz Saavedra, director de la Dian y quien aprobó con su firma la creación de la empresa, dice apenas "Representante Legal Díaz Familia y compañía S en C" (Ver Díaz flia y cia.jpg). Seguramente, la modestia los llevó a omitir sus nombres en el órgano de dirección de la compañía beneficiada.
En la rueda de prensa de marras, el ministro Fernández afirmó que no quería pasar por mentiroso. Por eso lo invito a que corrija lo que dijo, o a que demuestre que son falsos los documentos que sustentan esta columna.