Frente a la pronta reacción de las autoridades ante el lamentable asesinato del agente de la DEA James Terry Watson a manos de la banda de los 'Garchos' por resistirse al 'paseo millonario', nos deja el horrendo crimen algunos planteamientos. El mundo conoció a esa tenebrosa banda por su atrocidad, por la manera de someter a su víctima y por el engaño y la indefensión de quien perdió su vida tras defender su libre locomoción y tratar de salvaguardar su vida y sus bienes.
¿Dónde queda el respeto a la vida? ¿Qué tienen en su cabeza estos horrendos criminales? ¿Cuál es la política criminal del Estado para combatir este horrible flagelo? ¿Qué tiene que hacer la sociedad civil para combatir este crimen?
Cuestionamientos hay muchos y de toda índole, pero hoy lo que impera son planteamientos por hacer.
El crimen de James Terry Watson se pudo evitar, ¿por qué fue necesario que este hombre insignia de la DEA perdiera su vida para dar con esta banda que tenía azotados a los comensales y rumberos de la zona rosa de Bogotá.
Era evitable y previsible este asesinato si a mediados de mayo las autoridades hubiesen actuado en contra de 'Payaso', 'Garcho', 'Bávaro', 'Fabián', el 'Flaco' y todos sus secuaces. El pasado 5 de mayo, en la zona rosa de Bogotá abordó un taxi un ex subdirector del DAS cuyo nombre y los detalles omitiré por razones obvias. Siendo cerca de las 2 a. m., la víctima del momento y su acompañante fueron abordados en un concurrido sector por el 'Flaco', 'Bávaro', 'Fabián' y Payaso.
"Inobservancia de los protocolos, nunca pensé que me pasara esto a Mí”, relató el exfuncionario con asombro, dolor e impotencia. El mecanismo fue similar al que usaron con James Terry. La diferencia es que en esta ocasión las puñaladas de 'Bavario' no segaron la vida de este joven y buen colombiano.
"Alias el 'Flaco' me dijo: ¿Tomo por la izquierda o sigo derecho? Consultó, frenando suavemente el carro. Yo miré hacia atrás y me percaté deque venía un taxi con las luces apagadas pegado al que nosotros habíamos abordado en la calle 82, a lo que reaccioné diciéndole a mi novia: ¡Amor, nos van a robar! Abrí la puerta derecha y en segundos descendí del taxi; allí, sin mediar pregunta o algo parecido, alias 'Bavario' me propinó una puñalada, para mi gracia, no certera en el pecho. Intentó en mi cuello, con la mala suerte para él de que reaccioné y sólo tuve un rayón de su puñal en la parte posterior de la oreja.
Alias 'Payaso' subió al taxi por el costado en el que se encontraba mi novia, ella no alcanzó a bajarse como yo, se la llevaron por los 35 más largos minutos de mi vida y de la de ella. Montado en una patrulla buscamos el taxi por largos minutos, pero los oficiales, al percatarse de que estaba brotando sangre de mi pecho, me dejaron en el CAMI de la Perseverancia.
Me quedé en una camilla para que tomaran los exámenes de rigor. Gracias a Dios sólo fue un tema de puntos. Minutos después, mi novia marcó al celular de ella, el mío lo perdí en la carrera. Frustré el robo, pues me llevé la cartera de ella con todo. Le pegaron, la maltrataron, la dejaron tirada y la Policía lamentablemente poco hizo por nosotros, no sé... no hay sentir humano con quienes hemos sido víctimas de este Ffagelo".
Así como este caso pasó de agache, existen miles que se quedan en el garete de la Fiscalía, o, en el peor de los casos, ni se les presta atención. Seguramente si a este caso de un exalto funcionario de la inteligencia y seguridad nacional se le hubiera prestado atención con el apoyo de cámaras de vigilancia y testimonios, el agente Watson estaría disfrutando aún de su luna de miel con nuestra compatriota cartagenera, una esposa, una viuda más por cuenta de este horrible flagelo del que ni usted, ni yo, al paso que vamos, podríamos salvarnos.
Sí eso le pasa a un exalto funcionario de la inteligencia de nuestro país, y a un agente de la DEA, ¿qué nos espera a nosotros los ciudadanos de a pie? Estamos inermes ante este flagelo, no hay quien garantice nuestra seguridad.
Gracias al apoyo y la colaboración de este joven con agentes de la DEA y agencias de inteligencia de Estados Unidos, se logró el cometido la captura 'Payaso' y el 'Flaco', desde luego con el trabajo de la Policía de Colombia y el CTI, dado que la víctima sobreviviente de los 'Garchos' socializó con las autoridades lo mucho que percibió de la banda.
¿Por qué hoy salen abogados a defender lo indefendible? El derecho internacional público defiende a diplomáticos que son muertos a manos criminales, como es el caso del agente Watson. A mi juicio, en la medida en que estos bandidos logren hacerle trampa a la justicia y a la ley, muchos delincuentes más se motivarán a seguir delinquiendo con el llamado 'Paseo millonario' y muchos podremos ser sus víctimas.
Pensar que con la captura y la extradición pronta de los 'Garchos' se acabó el paseo millonario en la 93 y la 82 es como asegurar que con la muerte de Escobar se enterró el narcotráfico. La captura de estos 'angelitos', como quieren mostrarlos sus madres y esposas ante la inminente extradición, no denota una decreciente en este flagelo.
Esta bandola espantosa es tan solo uno de cientos de grupos de 'trabajo' liderados por un gran patrón que dice quiénes, cómo, cuándo y a qué hora roban en determinados sectores. Es decir, el tema es de mayor dimensión de lo que imaginamos, la más reciente víctima de este flagelo fue un exparlamentario en Cali; él no corrió la suerte del joven, a este casi anciano lo mataron y tiraron a un río en Cali.
En la medida en que avancen los tiempos para la extradición de los 'Garchos' a Estados Unidos, dejará mucho que pensar a la delincuencia. Como quien dice, a extraditarlos pronto, la demora nos perjudica.
¿Y qué tal si promovemos la inyección letal a quien cometiere este delito? Mañana puede ser usted, sus hijos, sus padres, su pareja, todos somos presa o blanco de ese flagelo.
Twitter: @GuilloRodrig
Abogado, Gobierno Seguridad y Desarrollo, Ex miembro Directorio Nacional Conservador.