Así se recupera el lago de Tota

El lago de Tota es uno de los ecosistemas más importantes y estratégicos del país, representa el 13,55 por ciento de la reserva de agua de Colombia y abastece aproximadamente a 250.000 personas; lo que equivale al 20 por ciento de la población del departamento de Boyacá. Aunque por muchos años ha sido degradado, ya empezamos a recuperarlo con acciones reales y tangibles.

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Para mejorar la calidad del agua del lago y de las cuencas del lago Upía y Alto Chicamocha, el pasado mes de marzo lanzamos una red de monitoreo hidrometereológico con siete estaciones, también ratificamos con alcaldes y autoridades ambientales nuestro compromiso de llevar a cabo mesas de trabajo para hacerle seguimiento a su recuperación.

Precisamente hace unos días trazamos una hoja de ruta para la implementación de proyectos de restauración ambiental, entre los que se destacan la realización de un programa de investigación para la identificación de especies que afecten el lago, un esquema de erradicación y control de las especies identificadas y el diseño de un modelo de proyectos de reforestación y restauración ecológica de áreas degradadas y de ecosistemas estratégicos, entre otros.

La ayuda de cooperación internacional ha sido muy importante para llevar a cabo estos proyectos, con la Agencia de Cooperación Francesa tenemos un convenio de aproximadamente 4,5 millones de euros para la gestión integral del recurso hídrico y el fortalecimiento de capacidades locales que nos ha ayudado con la red y con lo que se planeó en la hoja de ruta.

Precisamente las acciones de esta estrategia de trabajo están enmarcadas en el Conpes 3801 de 2014, que se presentó como un esfuerzo nacional para definir actuaciones de varias instituciones. El Ministerio de Ambiente tiene la responsabilidad de liderar acciones de articulación interinstitucional y por eso desde 2014 estuvo al frente de la conformación de la Mesa Técnica para la implementación de este Conpes.

Nuestra meta es cambiar el rumbo del lago para evitar que sigan los procesos de deterioro y de contaminación y sacar adelante iniciativas regionales y municipales. Hay que recordar que la laguna está declarada como Área Internacional para la Conservación de Aves (Aica), por eso nos esforzamos en encontrar soluciones al deterioro que ha sido causado principalmente por el desarrollo de actividades agrícolas y el vertimiento de aguas residuales.

El proyecto con la Agencia de Cooperación Francesa también tiene un componente de planificación, mediante la actualización y formulación del Plan de Ordenamiento de la Cuenca del Lago Tota y su área de influencia con la ejecución de las medidas relacionadas con los proyectos priorizados y la gestión del recurso hídrico. La cuenca tiene ya una presencia institucional importante, lo que ha permitido mejorar las capacidades de gestión y comunicación con la comunidad para definir medidas de mitigación frente a la contaminación, esto con la asesoría en tratamiento de aguas residuales e identificación de la información disponible y relevante para la actualización de los procesos de ordenación y manejo ambiental de la cuenca y sus recursos.

Adicionalmente, se ha apoyado de manera permanente a las alcaldías y autoridades ambientales sobre el manejo de estas aguas para así avanzar en la priorización de acciones para la rehabilitación de cinco zonas críticas priorizadas para emprender medidas de reducción de la degradación de suelos y cobertura vegetal.

Frente a la coordinación interinstitucional hemos involucrado a la comunidad en atención a las necesidades de sustitución de actividades productivas asociadas al lago, así cuenta con capacidad tecnológica instalada para desarrollar proyectos productivos sobre aprovechamiento de biomasa vegetal con la adquisición y puesta en marcha de maquinaria cosechadora y movilización de malezas acuáticas. Casi 1.500 actores locales en 20 localidades han participado en la socialización de proyectos y concertación, y hemos capacitado a estudiantes sobre la cultura del agua. Por eso, la articulación de diversos actores y la ayuda de recursos internacionales abren el camino para la sostenibilidad del ecosistema a corto, mediano y largo plazo.

Y es que no solo se han fortalecido las capacidades institucionales sino también tecnológicas con la adquisición de GPS, dotación de laboratorios de análisis e implementación de estaciones de monitoreo para realizar control y monitoreo de la calidad del agua. Además, también hemos incorporado un componente fundamental a todo este proceso que es la mitigación y adaptación al cambio climático.

Como Ministerio de Ambiente y en el marco de nuestras funciones, realizamos el acompañamiento y asesoría técnica a los actores del Sistema Nacional Ambiental para garantizar la sostenibilidad de las acciones implementadas a través de este y otros procesos. El lago de Tota está en el camino correcto para que renazca y reverdezca.

*Ministro de Ambiente.