Unidad Nacional hundiría proyecto contra la reelección, dice el Polo

La discusión parece prematura. Pero el Polo Democrático, que inició una batalla política para que la Constitución se rectifique y prohíba la reelección presidencial inmediata, giró el debate hacia el presidente Juan Manuel Santos.
 
Alexánder López (Polo), actual vicepresidente del Senado y autor del proyecto, afirmó públicamente que el presidente Juan Manuel Santos habría dado órdenes a los partidos políticos de la Unidad Nacional para hundir esta iniciativa, que empezó su discusión en la Comisión Primera del Senado.
 
Con esa tesis, el Polo le exigió al presidente Santos que defina su postura sobre la reelección y que aclare si en sus intenciones está la aspiración a un segundo mandato de forma inmediata.
 
“Considero que Santos ha orientado esta discusión en el país para él, naturalmente, avanzar en su proyecto de reelección presidencial, por lo que creo que debe ser más sincero con el país y decir de una vez que se quiere reelegir para saber nosotros también a qué atenernos”, consideró Alexánder López.
 
Sin embargo, el Polo considera que al ordenarle a la Unidad Nacional no discutir la prohibición de la reelección, el presidente busca asegurar un segundo mandato.
 
“El no permitir que este proyecto se discuta es una decisión que se tiene tomada por el presidente Santos y por sus bancadas en la Unidad Nacional, para avanzar en un proyecto de reelección de otros cuatro años del presidente Santos”, consideró López.
 
Reelección no está en la agenda del Gobierno
 
Miembros de la Unidad Nacional rechazaron las afirmaciones del Polo. El senador Luis Fernando Velasco (Partido Liberal), presidente de la Comisión Primera del Senado, dijo que la discusión de este proyecto fue aplazada por petición expresa del Polo Democrático, y no por algún acuerdo soterrado entre los partidos políticos que acompañan el gobierno Santos.
 
Velasco también afirmó que la reelección, de momento, no está en la agenda, ni en el Congreso ni en el Ejecutivo ni en el país en general. Las prioridades son otras. Primero, la Comisión Primera del Senado decidió abordar dos reformas constitucionales: la reforma a la justicia, iniciativa del Gobierno, y la prohibición del aborto, iniciativa del partido Conservador respaldada por la firma de cerca de cinco millones de colombianos. “De momento, esas son las prioridades”, dice Velasco.
 
Como estos dos temas pueden ocupar las sesiones del mes de octubre, el proyecto contra la reelección, que este semestre necesitaría superar cuatro debates, empezaría a ser discutido en noviembre. Por términos parecería hundido.
 
Velasco no comprometió la posición del Partido Liberal ni las de los demás partidos de la Unidad Nacional. Pero en su criterio personal consideró poco viable volver a cambiar las reglas de juego. Consideró que al presidente Santos hay que dejarle abierta la posibilidad de aspirar a un segundo mandato.
 
Para el senador liberal, el debate sobre la conveniencia o no de la reelección se debería dar con la experiencia de otros mandatarios reelegidos. Por eso insinuó que esta figura, admitida en la Constitución, debería ser evaluada en el 2018, o cuando haya habido más de dos mandatarios reelegidos. 
 
Insistirán en la discusión
 
Pese a esta situación, el Polo insistirá en la discusión para demostrar que la figura de la reelección presidencial alteró el sistema de pesos y contrapesos entre los poderes públicos.
 
Y aunque el Partido Liberal, miembro de la Unidad Nacional, insista en que el equilibrio de poderes se puede revertir con una reforma legal que le impida al Ejecutivo facultades nominadoras, el Polo insiste en que la única forma es prohibir la reelección.
 
La discusión parece prematura. Pero entró en debate, a tan solo 13 meses del actual gobierno, por cuenta del proyecto radicado por el partido de oposición.
 
La próxima semana se sabrá si los partidos políticos de la coalición de gobierno aceptan el debate o lo hunden aprovechando sus mayorías. Si es así, la discusión sobre la reelección quedaría congelada, pero le dejarían abiertas las puertas al presidente Santos para que, en su momento, decida si tiene o no intenciones electorales para el 2014.