Las cadenas de WhatsApp son un riesgo para la sociedad. | Foto: Archivo particular

APLICACIONES

Alerta: el daño que hacen algunas cadenas de Whatsapp

El episodio reciente que involucró a una marca querida como Pony Malta, volvió a mostrar la sorprendente credulidad de los usuarios. ¿Qué hay detrás de estos peligrosos audios?

1 de octubre de 2015

No deja de sorprender que en pleno de 2015 millones de personas que utilizan plataformas como Whatsapp caigan en el juego de las cadenas de audios. Y es que precisamente, la crisis que tuvo que enfrentar Bavaria, con su querida Pony Malta, el miércoles pasado, nació de un dañino juego que se propagó en las redes.

Pero los resultados de esa cadena no son tan divertidos. De hecho, son punibles. Lo que hicieron esas personas, no identificadas, contra Bavaria tiene un nombre técnico: hoax, que no es más que convertir una noticia falsa en algo ‘verdadero’ a fuerza de réplicas. Es un engaño masivo que se vale de medios electrónicos para propagarse.

Lo paradójico del asunto es que las cadenas de mensajes son tan viejas como el mismo internet. ¿Recuerda a finales de los 90 las primeras cadenas absurdas de correos en Hotmail en las que le echaban una maldición de satán si no enviaba el correo a 20 personas? Lo único que cambió es la plataforma, lo que se mantiene es la inocencia de unos y la maldad de otros.

Las cadenas de correos buscaban sumar una gran cantidad de direcciones de correo de cuentas activas para después enviarles publicidad o virus.  El caso de WhatsApp es más ingenuo, pero más dañino. Los antecedentes son funestos. Después del petardo que estalló en una sede de Porvenir en el norte de Bogotá hace pocos meses, circuló otro audio que anunciaba “nuevos atentados informados por un alto funcionario del ministerio de Defensa”. La mentira llegó al teléfono de millones de bogotanos, que en vez de cuestionarse replicaban la información y la daban como cierta.

Cuando estas cadenas atentan contra la tranquilidad de los ciudadanos, lo que era una broma de mal gusto, se convierte en una amenaza al orden público y motivo de investigación por parte de las autoridades. El problema de estas prácticas es que es casi imposible llegar al mensaje y autores originales de estos hoax, por eso todo queda en la impunidad de las redes sociales.

¿Qué debe tener en cuenta?


1.       Una comunicación real corporativa jamás llega por medio de una cadena. Las empresas hablan de frente, directo con los usuarios.

2.       Si tiene dudas, antes de ponerse a reenviar cadenas inútiles de mensajes, consulte directamente con la página de internet de quien provee el servicio. Si hay novedades o cambios en las políticas, allí debe haber noticias.

3.       No es un chiste. Si usted replica estas cadenas y ellas atentan contra el orden público o la tranquilidad de los ciudadanos, se puede exponer a la investigación y posterior sanción de las autoridades, por promover conductas delictivas.

4.       No sea ingenuo. Las cadenas en internet no buscan nada, sólo hacer una maldad e impulsar que los usuarios como borregos sigan una instrucción por el temor a perder el servicio.