El valor de la tradición

El régimen de lluvias que vivió el país durante buena parte de 2017 aguó la fiesta de muchas compañías y, particularmente, las de bebidas. Pero Bavaria, con 129 años de tradición en el negocio cervecero, confirmó que con una buena estrategia bien ejecutada y, sobre todo, con un equipo humano de alta calidad es posible enfrentar la adversidad y superar los resultados.

La empresa este año planea invertir 95 millones de dólares en expandir y modernizar sus plantas, logística y empaques y ofrecer un portafolio de productos mucho más robusto. Esto, junto con las nuevas ocasiones de consumo que genera el Mundial de Fútbol Rusia 2018 –del cual es patrocinador oficial–, le permitirá recoger buenos frutos.

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El año pasado, la compañía logró aumentar su rentabilidad y su ebitda, a pesar de la caída en sus ingresos. Las ventas de Bavaria alcanzaron los 6,7 billones de pesos en 2017 frente a 7,1 billones de pesos de 2016, pero la utilidad neta alcanzó los 1,9 billones de pesos al final del ejercicio financiero, por encima de los 1,3 billones de un año atrás. El ebitda, por su parte, llegó a 3,08 billones de pesos frente a los 2,9 billones de 2016.

El esfuerzo no fue menor. Por eso, Ricardo Moreira, presidente en Colombia de Bavaria, la filial de la multinacional AB InBev, define 2017 como un año retador para la compañía, pues, además del ‘chaparrón’ generado por el clima, el consumo se vio afectado por el aumento de 3 puntos en el IVA (del 16 al 19 por ciento); hubo confusión en todo el país por el nuevo Código de Policía y una fuerte desaceleración de la economía derivada de la caída en la confianza de los consumidores.

En medio de este explosivo coctel, la compañía se enfocó en tres temas clave: innovación, inversión y mejor gestión de los recursos y el talento. En el primer caso, trabajó por impulsar tres marcas globales que han conquistado el paladar de los colombianos: Corona, Budweiser y Stella Artois. Estas se suman a un amplio portafolio de marcas locales que le permiten a la compañía mantener una robusta operación, que genera 4.000 empleos directos y cerca de 80.000 indirectos; además, representa casi el 1 por ciento del PIB en la economía del país y produce más de 4,5 billones de pesos en impuestos específicos y corporativos, de acuerdo con un estudio de Fedesarrollo.

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En inversiones, las cifras del año pasado superaron un billón de pesos en procesos de modernización, logística y mercadeo. Para este año, superarán los 95 millones de dólares e incluyen expansiones de planta, innovación de empaques y tecnología

–básicamente actualización y equipos de transporte más eficientes–. Una de las apuestas más ambiciosas es lograr que para 2025 todos los productos tengan envases retornables o hechos con materiales reciclados, y en este momento, más del 75 por ciento son retornables. Marcas como Pony Malta ya tienen 50 por ciento de material reciclado en sus empaques.

En gestión del talento, Bavaria no solo trasladó a Bogotá la operación del centro de control de la Zona Copec, conformada por Colombia, Perú y Ecuador, sino que además generó nuevas oportunidades de crecimiento para sus colaboradores y externos. A través de los programas caza talentos Global Management Trainees GMTs al que se presentaron más de 10.000 aspirantes solo en Colombia, Trainee Supply, Talento Comercial y Talento Logístico, el año pasado ingresaron a la compañía un total de 99 jóvenes.

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También tiene un destacado compromiso social. Para Moreira “la sostenibilidad no solo hace parte de nuestro negocio: es nuestro negocio”. Por eso, tienen metas a 2025 en temas de agricultura inteligente, custodia del agua, la estrategia de economía circular en sus empaques y la acción climática.

En el centro del país, donde cuenta con su mayor planta industrial –la de Tocancipá fabrica casi 40 por ciento del total de sus bebidas– impulsa hace una década un programa con cultivadores de cebada, con semillas de la calidad requerida para sus cervezas. El objetivo es que la producción de Boyacá y Cundinamarca pueda sustituir buena parte de las importaciones de cebada, generar empleo local y apoyar a los empresarios del campo con una alternativa que les produzca mejores rendimientos e ingresos. Sus frutos ya comienzan a verse: 2.800 hectáreas sembradas benefician a 242 agricultores este año, y para 2020 serán 9.000 hectáreas. En este programa invierte un millón de dólares.

Desde finales del año pasado, Bavaria lanzó su programa social Creciendo por un Sueño, que busca transformar la vida de 50.000 mujeres emprendedoras para 2020. Comenzó con mujeres cabeza de familia que tienen tiendas como medio de sustento, y en 2018 planea impactar 10.000 de ellas en 20 ciudades del país. Para cumplir su compromiso con el agua, este año trabajarán en el páramo de Santurbán con comunidades campesinas, para restaurar y proteger 300 hectáreas.

Durante 2018 Bavaria planea realizar inversiones por 14.600 millones de pesos en los programas de responsabilidad social empresarial.