ANTIPERSONAJE - Andrés Uriel Gallego, Ministro de Transporte
Para algunos, los seis años al frente del Ministerio de Transporte han sido desperdiciados por la falta de ejecución de obras de infraestructura. Además sienten que por sus demoras Colombia perdió el año pasado la oportunidad de conseguir financiación barata y abundante para las obras más apremiantes en carreteras. Muy pocos apoyan incondicionalmente su gestión. Este año no ha sido nada fácil para Gallego. Hubo paro de camioneros, no hay muchos avances para mostrar en infraestructura, hay derrumbes constantes en las vías causados por temporada invernal, los programas de chatarrización vehicular no funcionan bien y el Plan 2.500, que pretende pavimentar 3.500 kilómetros de carreteras regionales, no termina de ejecutarse. Todo esto ha puesto a Gallego la mira de los críticos. Diversos sectores han pedido su cabeza en numerosas ocasiones y pocos entienden qué lo sostiene en su puesto.