Alimentación orgánica y medicamentos naturales: la nueva tendencia entre las mascotas

Los animales domésticos demandan atención y cuidados como cualquier otro miembro de la familia. Y las tendencias para su alimentación, salud y bienestar toman el mismo rumbo que el de las personas.

En el caso de la medicina, por ejemplo, hay avances en la homeopática o naturista, que emplea una variedad de prácticas pseudocientíficas calificadas como naturales y no invasivas, y con muy buenos resultados.

En la medicina animal, la alternativa naturista produjo los fitogénicos, que en un principio se usaron en los animales criados para el consumo humano. Dicho de otro modo, los medicamentos eran utilizados para evitar que las personas consumieran excesos de químicos. Sin embargo, con el tiempo el propósito cambió y los fitogénicos fueron utilizados para promover el bienestar animal y prevenir las enfermedades. Su eficacia ha sido comprobada farmacológicamente en animales y personas.

Ahora, ¿qué son los fitogénicos?

Las plantas tienen cualidades increíbles para mejorar el rendimiento de los animales y de las personas. De este descubrimiento vienen los fitogénicos: son combinaciones estandarizadas de compuestos bioactivos que se encuentran en la naturaleza.

En Colombia uno de los pioneros en desarrollar este tipo de medicina para los animales es la farmacéutica Pharvet. El laboratorio lleva 29 años en funcionamiento, y con el tiempo amplió su oferta de productos. Comenzó en el sector pecuario y avícola y, desde hace seis años, tiene una línea de bienestar para mascotas a partir de los fitogénicos.

Lácides Serrano, director científico y fundador de Pharvet, maestro e investigador en farmacología en medicina veterinaria, cuenta que la línea especializada en mascotas nació por un cambio de perspectiva: la relación entre las personas y sus mascotas se estrechó, a tal punto que hoy son miembros de la familia. Así creció la exigencia para garantizarles su bienestar.

Actualmente, explica Serrano, la farmacéutica se centra en el desarrollo de los fitogénicos, que previenen enfermedades y no tienen mayores inconvenientes de reacciones colaterales o efectos secundarios, y una línea de suplementos nutracéuticos –alimentos poderosos que van más allá de la nutrición–.

¿Pueden los fitogénicos reemplazar los fármacos tradicionales?

“Definitivamente no. Cada farmacología tiene un objetivo diferente”, explica Serrano. Y añade: “Los fitogénicos están dirigidos a prevenir, mitigar y controlar afecciones en los sistemas orgánicos de las mascotas, por ejemplo, el sistema nervioso central, el cardiovascular, el locomotor o el urinario.

Los fármacos químicos o tradicionales, en cambio, atacan de manera directa e inmediata las enfermedades”. El tema se entiende mejor con un ejemplo: si una mascota presenta cuadros de infecciones urinarias, Pharvet recomienda utilizar Uriphar, un suplemento alimenticio desarrollado por ellos con principios fitogénicos. Está hecho a base de extracto de arándano y de canela, D-manosa y zinc.

El medicamento –que sirve para perros y gatos de todas las edades– ayudará a controlar y evitar contaminaciones en el sistema urinario. Sin embargo, si ya están avanzadas y han comprometido algún órgano, debe tratarse con un fármaco químico que ataque de manera inmediata la enfermedad.

Por la creciente tendencia a preferir alimentos y medicamentos naturales, a prevenir en vez de curar y a buscar tratamientos que no sean invasivos, Serrano está convencido de que los fitogénicos son el futuro de la medicina veterinaria: “Me atrevo a decir que de la medicina veterinaria y de la humana también”.

Ahora el gran reto para esta industria es seguir desarrollando las mejores combinaciones de sustancias naturales, mientras aprovechan los componentes activos de las mismas.

*Contenido elaborado con apoyo de Pharvet.