Artrosis en gatos y perros, una enfermedad que crece en Latinoamérica

Un estudio realizado por el Ourofino Salud Animal destacó que la artrosis se está convirtiendo en una de las enfermedades de mascotas que más crece a nivel regional.

Según las estadísticas de la investigación, el 38% de los perros sufren de problemas en sus articulaciones, lo que convierte a la artrosis en un padecimiento que aumenta en paralelo a diferentes factores como la longevidad, la genética, los traumatismos y el sobrepeso.

En este sentido, el Ourofino Salud Animal subrayó la importancia de que los dueños de los animales se concienticen de los cuidados que deben tener con sus mascotas.

El estudio añadió que la artrosis en los perros se presenta con dolores principalmente en las articulaciones de los codos, las rodillas y la cadera. A su vez, la investigación destacó que las razas más propensas a sufrir de artrosis son el pastor alemán, el rottweiler, el gran danés, el golden retriever, el labrador retriever, el san bernardo, el galgo, el terranova, el border collie y el bernese, entre otros.

Por su parte, en las razas medianas y pequeñas, quienes más la padecen son los dachshunds, el bulldog y el carlino.

En relación a los gatos, el estudio identificó que el 40% de los felinos presentan signos clínicos de artrosis, mientras que el 90% mayores de 12 años padecen de dicha enfermedad.

“La artrosis es una enfermedad articular en la que se desgasta el cartílago que acolcha la articulación, lo que resulta en la exposición del hueso y la aparición de dolor. Esta enfermedad puede ser primaria o secundaria a traumatismos o malformaciones de la articulación. La artrosis primaria aparece en articulaciones previamente normales que no han sufrido ningún tipo de traumatismo y es la más frecuente en gatos mayores”, señaló el portal Avepa.

Cabe destacar que el tratamiento de la artrosis no inicia o concluye con una medicación o un alimento. Por eso es importante que las personas con mascotas adapten su hogar para el beneficio de los animales.

Colocar camas blandas que sean más confortables para las articulaciones doloridas, adecuar escalones para facilitar el acceso al sofá, puerta gatera u otros lugares elevados, mantener la puerta abierta para que el gato no tenga que empujarla al momento de salir o entrar, tener siempre una bandeja de arena en el interior de la casa que sea baja para facilitarl el acceso, y ubicar el agua y la comida en un mismo nivel de la casa para que el gato no tenga que subir o bajar escaleras, son algunas de las recomendaciones para que estos animales pueden vivir en mejores condiciones.

Todo esto es importante si se tiene en cuenta que en países como Estados Unidos, en los últimos 10 años, se registró un aumento del 66% en el número de perros con osteoartritis y del 150% en los gatos.