Día del tiburón ballena: cinco datos sobre estos fantásticos animales

Esos gigantes repletos de pecas tienen presencia en el país en ambos océanos. En el Atlántico pueden distribuirse entre las Islas del Rosario, Isla Fuerte, Taganga, Capurganá y La Guajira. Mientras que en el Pacífico suelen rondar por Gorgona, Malpelo, Nuquí, Bahía Solano y Bahía Cupica. 

A pesar de su gran tamaño y fortaleza se encuentran en peligro ya que sufren de múltiples amenazas. Una de ellas es la pesca, al frecuentar las mismas áreas que los bancos de atún quedan atrapados en las redes. Otro de los riesgo que deben sortear, por increíble que parezca, son los barcos, ya que los estos tiburones migratorios y sus áreas de navegación y alimentación coinciden con las rutas de navegación de las embarcaciones que pueden chocarlos.

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En el Día del Tiburón Ballena, el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés) revela cinco datos sobre estos animales asombrosos.

1. Los tiburones ballena tienen una armadura que protege sus ojos

Los ojos del tiburón ballena están cubiertos de pequeños dientes o dentículos. Un equipo de científicos japoneses descubrió que tienen una especie de armadura única, compuesta por 2.900 dentículos que cubren cada ojo. Estos dentículos son distintos a los que tiene en su piel ya que cumplen una función distinta.

Los ojos del tiburón ballena sobresalen a cada lado de la cabeza del animal, por lo que se considera que esta armadura especial está diseñada para protegerlos.

Los tiburones ballena tienen hasta 2.900 dentículos por cada ojo. Foto: © naturepl.com / David Fleetham / WWF

2. Las explosiones nucleares permitieron determinar correctamente la edad de un tiburón ballena

Comprender cómo las especies crecen, maduran y envejecen es crucial para poder protegerlas de manera efectiva. Anteriormente, los científicos solían contar bandas de crecimiento en las vértebras del tiburón ballena para determinar la edad del animal, lo que funciona igual a contar los anillos de los árboles. Sin embargo, los investigadores de todo el mundo no pudieron ponerse de acuerdo sobre si estas bandas se estaban desarrollando en los tiburones ballena una vez al año o cada dos años, lo que marca una gran diferencia. 

A principios de 2020, los científicos pudieron finalmente resolver este enigma debido a algo increíble: las pruebas de la bomba atómica que tuvieron lugar en las décadas de 1950 y 1960. Estas explosiones duplicaron la cantidad de un isótopo de carbono particular (Carbono-14) en la atmósfera, que finalmente fue absorbido por todos los organismos vivos del planeta. 

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“Y, como sabemos qué tan rápido se desintegra este isótopo de carbono con el tiempo, se puede utilizar para determinar la edad. Usando este método en particular por primera vez, los científicos finalmente pudieron confirmar que las bandas vertebrales se forman en los tiburones ballena cada año. Esto significa que finalmente podemos estimar correctamente la edad de estos gigantes y, así, saber que el espécimen más antiguo registrado tiene 50 años”, indica WWF.

3. Las mamás de los tiburones ballena actúan como gigantes bancos de esperma

Hace 10 años un equipo de científicos estudió embriones de tiburones ballena encontrados dentro de una gran hembra capturada en la costa de Taiwán hace 25 años. En ese momento encontraron 304 embriones en diferentes etapas de desarrollo, superando con creces el número más alto registrado en cualquier otra especie de tiburón.

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Pero había un gran misterio por resolver, cómo los bebés podían ser de diferentes tamaños y estar en diferentes etapas de desarrollo. Los científicos pensaron que quizás los cachorros fueron engendrados por diferentes machos en diferentes momentos, lo que explicaría las diferencias en el desarrollo. Sin embargo, no fue hasta hace poco que los investigadores pudieron confirmar que todos esos tiburones ballena bebés tenían el mismo padre gracias a las pruebas de ADN de paternidad. Este descubrimiento reveló que las hembras de tiburón ballena pueden actuar como gigantescos bancos de esperma, capaces de almacenar esperma y de fertilizar óvulos durante un período de tiempo. Según los científicos, las mamás de tiburones ballena lo hacen para maximizar las posibilidades de supervivencia de sus bebés.

4. Muchos tiburones ballenas mueren al consumir plástico

Los tiburones ballena se alimentan por filtración en la superficie y varios individuos han sido hallados muertos con cantidades significativas de plásticos en el estómago, por lo que se cree que la contaminación plástica marina afecta a estos animales.

El reporte de WWF asegura que: “Diferentes investigadores estudiaron el impacto de la contaminación marina por plástico en los tiburones ballena en Indonesia y, lamentablemente, lo que descubrieron no fue una buena noticia. Indonesia fue seleccionada para este estudio, pues ocupa el infame segundo lugar en la lista de los mayores contaminadores de plásticos marinos del mundo. Después de estudiar la abundancia de plástico en tres lugares del país, los investigadores concluyeron que los tiburones ballena podrían estar comiendo hasta 137 piezas de plástico marino por hora. Esto incluye microplásticos diminutos como piezas más grandes que miden casi 50 centímetros”. 

Aunque los tiburones ballena pueden expulsar objetos grandes que terminan accidentalmente en sus bocas, a juzgar por las necropsias de individuos que se encuentran en las playas de todo el mundo, ese mecanismo no siempre funciona. Como reveló un informe de Sabah en Malasia, una bolsa de plástico de 46 centímetros por 32 centímetros mató a un tiburón ballena allí. 

Un tiburón ballena nada cerca a una bolsa plástica flotando en el mar en Filipinas © Steve De Neef / National Geographic Creative

5. Los tiburones ballenas adolescentes son hogareños

Los tiburones Ballena suelen migrar por largas distancias. De hecho, WWF tiene el reporte de una hembra llama Anne que viajó más de 20.000 kilómetros en dos años y tres meses. Pero ahora, estudios de varios expertos que estudian sus sitios de agregación regionales en todo el mundo, lograron determinar que los machos jóvenes son realmente hogareños. Estos merodean por las mismas áreas durante largos períodos de tiempo y que, a menudo, regresan a los mismos lugares año tras año. 

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Algunos tiburones estudiados en el océano Atlántico occidental fueron vistos allí durante más de 10 años y otros en el océano Índico regresaron al mismo sitio durante 7 años consecutivos. Estos descubrimientos fueron posibles porque los tiburones ballena individuales se pueden identificar y, por ende, rastrearlos, gracias a sus patrones de piel únicos. Una constelación de puntos blancos que cubre su cuerpo actúa de la misma forma que las huellas dactilares en nosotros, las personas. 

A pesar de su gran tamaño todavía es difícil determinar los lugares donde las hembras y los machos adultos pasan la mayor parte de sus vidas y tampoco dónde dan a luz y pasan los primeros años de vida.