¡Robaron hasta turistas coreanos! Se registró un nuevo atraco masivo en un restaurante en Bogotá

La inseguridad sigue desbordada en Bogotá. Cuatro delincuentes sometieron con armas de fuego y cuchillos y robaron a todos los clientes y trabajadores de un restaurante, ubicado en la localidad de Teusaquillo.

Este hecho ocurrió la noche del pasado jueves 2 de diciembre, exactamente en la carrera 19 con calle 45. Cerca de las 9:00 p. m. los sujetos llegaron a este establecimiento comercial y apuntaron en la cabeza a casi 15 personas, despojándolos de sus pertenencias: celulares, relojes, prendas y dinero.

Según relató al canal CityTv un trabajador del restaurante, identificado como Michael Montoya, fueron momentos de mucha angustia porque los ladrones iban robando de mesa en mesa, y finalmente se llevaron todo el dinero de la caja registradora.

En el lugar se encontraban unos turistas de Corea del Sur, quienes al igual que los demás clientes, no tuvieron más opción que entregar todas su pertenencias de valor.

Entre las víctimas se encontraba Harrison Triana, un profesor que celebraba la despedida de fin de curso de un grupo de alumnos, quien dijo que temió por la integridad y la vida de los jóvenes que lo acompañaban.

Hernando Carvalho, un activista político que adelantaba una reunión con los turistas coreanos en el restaurante, exigió que se permita el libre porte de armas, ya que según denunció, la Policía no es capaz de controlar la inseguridad y la violencia, “entonces al ciudadano le toca defenderse”.

Carvalho denunció que no hubo un balazo pero los hubieran podido matar a todos, porque los hampones los apuntaron con las pistolas y los amenazaron con dispararles si los seguían, escaparon. “Esto se hubiera podido evitar si el vigilante del restaurante tuviera un arma”, dijo el afectado al canal de noticias local.

Uniformados de la Policía acudieron al sitio a los pocos minutos de haber sucedido el robo masivo, pero solo alcanzaron a recoger los testimonios de las personas robadas.

El más reciente reporte de la Secretaría de Seguridad de Bogotá da cuenta del panorama de la inseguridad en la ciudad capital. El documento indica que, en los diez primeros meses del año, el delito de hurto a personas se elevó 28 % en comparación con los mismos meses del año 2020.

En detalle, esta entidad adscrita a la Alcaldía de Bogotá, refiere en el informe que hasta el mes de octubre se registraron 10.212 denuncias de hurto a personas, 2.595 más que los casos contabilizados en el mismo periodo del año anterior.

Esta modalidad de robo masivo ocurre con mucha frecuencia en diferentes zonas de Bogotá. El pasado 31 de agosto y el 16 de octubre, dos robos masivos en restaurantes, ubicados en el norte de la ciudad capital, perturbaron la tranquilidad de los ciudadanos.

El primero de estos hechos ocurrió el 31 de agosto en un restaurante ubicado en el sector de Cedritos, al norte de Bogotá. Sobre las 8:20 p. m., tres hombres que vestían prendas de domiciliarios Rappi ingresaron al lugar y asaltaron a cerca de treinta personas que se encontraban comiendo en el restaurante Champetúa del Mono.

En el video de la cámara de seguridad del lugar se puede apreciar cuando los ladrones ingresaron al lugar y mientras uno vigila en la puerta con un arma en la mano, el otro anunció que robaría a los presentes. Hurtaron celulares, dinero y hasta un casco de motociclista.

De acuerdo con lo que narraron las víctimas en diferentes medios de comunicación, la seguridad en el barrio no es la más óptima y la Policía siempre llega tarde.

El segundo robo masivo se presentó el 16 de octubre, en un restaurante ubicado a pocas cuadras del reconocido Parque de la 93, en Bogotá. Los comensales fueron víctima de los ladrones que se movilizaban en una motocicleta color negro, a eso de las tres de la tarde de ese día.

Entre los afectados había una familia que tenía al menos dos niños pequeños de brazos. Según las imágenes grabadas en un video se observa que el ladrón fue despojando de sus pertenencias personales a los comensales y hasta se dispuso a requisar violentamente el coche de un bebé para constatar qué se podía robar.