Un estudio revela que el tapabocas hace ver más atractivas a las personas

El pasado 11 de marzo de 2020, la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que la epidemia de la covid-19 nacida en Wuhan, China, ya podría considerarse como una pandemia, teniendo en cuenta que para esa fecha la enfermedad ya tenía alta presencia en todo el planeta.

Sin embargo, meses antes de esa fecha, en muchos países la covid-19 ya había causado varios estragos en los sistemas sanitarios, por lo que desde un principio la recomendación fue clara: siempre usar tapabocas como medida primaria para reducir el contagio por el nuevo coronavirus.

Por supuesto, el hecho de que sea una medida necesaria no hace que el uso del tapabocas sea un requerimiento popular. A casi dos años, las personas aseguran estar fastidiadas de usar en todo momento este producto, ya que, según exponen algunas, la mascarilla limita en gran medida la respiración y por ende alimenta otros problemas de salud en el cuerpo.

No obstante, los defensores de este elemento han intentado por todos los medios hacer que su uso sea mucho más ameno entre las personas, incluso con estudios en los que se aseguran que el tapabocas hace ver mucho más atractivo a quien lo usa.

Así lo explica un estudio de la Universidad de Cardiff, en Reino Unido, titulado Más allá de la belleza de la oclusión: las máscaras médicas aumentan el atractivo facial más que otras cubiertas faciales, en el que se asegura que el tapabocas puede hacer, especialmente en el caso de los hombres, que las mujeres los vean mucho más atractivos que con el rostro descubierto o con otra clase de elemento protector.

Para llegar a esta conclusión, los investigadores escogieron un grupo de estudio conformado por 43 mujeres a las que se les mostraron fotos de hombres con tapabocas, tanto quirúrgicos como de tela; con libros frente a su rostro o simplemente con su cara descubierta.

“Para explorar más a fondo este tema, a las participantes femeninas se les presentó una serie de rostros masculinos de bajo o alto atractivo que se taparon con una máscara médica, una máscara de tela, un libro o no se taparon y se les pidió que calificaran su atractivo”, explica el estudio.

Así, de acuerdo con el informe, los resultados se pueden resumir: “Los rostros se consideraron más atractivos cuando estaban cubiertos por mascarillas médicas y significativamente más atractivos cuando estaban tapados con mascarillas de tela que cuando no estaban tapados”.

Igualmente, se explica que, como se podría esperar, el tapabocas no solo esconde algunas imperfecciones físicas que podrían no ser deseables entre las mujeres (dentadura irregular, acné, barba mal cuidada, entre otros), sino que además da un toque de misterio a la persona que lo usa.

“La ventaja de una máscara de tela se puede atribuir al efecto de oclusión, pero el efecto de la máscara médica va más allá de ocultar las características indeseables. Es posible que la ventaja adicional de las mascarillas médicas provenga de sus asociaciones con profesionales médicos.’’, añade el estudio.

El informe final asegura también que los tapabocas pueden añadir un toque de misticismo en la mente de las personas, ya que muchas veces el cerebro, ante la ausencia de rasgos característicos como los labios o la barbilla, decide crear estas características con el fin de rellenar los espacios anatómicos inobservables. Sin embargo, en este proceso, el cerebro siempre trata de exagerar dichos detalles hacia un imaginario mucho más atractivo que el que puede ser en realidad.

“Hubo una disminución en la asociación entre el uso de mascarillas y la falta de salud percibida entre las versiones prepandémica y pandémica de los experimentos, lo que indica que la covid-19 podría estar sustentando este cambio en la percepción del atractivo de los rostros con mascarillas”, añade el documento académico.

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