El Bohemio Andrés Calamaro

¿Es la música la forma más hermosa de santificar la locura? Frank Zappa diría que si … La música es especial, parece obra de algún dios caprichoso. Sin desmerecer la sensibilidad del cine, la literatura, las artes plásticas y la poesía; sospechamos que la música una la forma de beatificar la locura con armonía.

¿Una vida desprovista de sonido es una vida desprovista de sentido? Beethoven no diría lo mismo, era sordo y escribió nueve sinfonías y media. Una vida sin sonido podría ajustarse a las infinitas sensaciones del tacto, ofrecerse a la lectura y a la degustación de delicias culinarias. No es el peor de los destinos.

¿Aparte de la musa, qué hay de mujer en la música? Según nuestro ultimo video, "Cuando No Estas" dirigido por Leo Damario, el rock también es mujer … La música es del genero femenino, como Argentina y Colombia, que también tienen nombre de mujer.

¿Hay algo más gratificante que componer con el único fin de ver sonreír a una mujer? Sacarle la ropa, amar y ser amado. Pero la alegria no es posible sin las dos sonrisas de la mujer, la vertical y la sonrisa horizontal.

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¿Crear debería ser para todo hombre su primera obligación moral? No. Algunos hombres serán creadores pero todos los hombres tienen que ser buena gente, ofrecer nobleza e inteligencia, ser valientes y graciosos.

¿Debe ser la obra un dios y su padre un demonio, o al contrario? Hay que intentarlo de las dos maneras, pero lo mas justo seria suponer que si, que la obra es dios y el autor, un demonio … Sin descartar incursiones en la posibilidad de sentirnos dioses pariendo un instante satánico, dioses menores, dioses que caminan por la tierra …. No pierda usted de vista La india, donde creen en más de tres mil dioses. ¿Cuánta dosis de sufrimiento se requiere para crear algo medianamente perfecto? O, si no perfecto, algo que por lo menos calme en el artista sus instintos más violentos. Alguna dosis se requiere, no tiene porque ser dolor en dosis; es posible malgastar el sufrir y no escribir ni una canción decente, y tambien podemos escribir inyectados de entusiasmo, convicciones o rabia. Algo va a calmarnos.

¿Qué tanto espíritu destructor necesita un espíritu creador?

Que buena pregunta, no quisiera empañarla con una respuesta impropia. Voy a intentar despertar mi espíritu creativo sin destruir nada. El precio es demasiado alto, y las canciones son para los demás.

¿La “sensibilidad artística” no es más que otra forma de llamar a lo que es simple amor e inclinación hacia lo trágico? Quizas en el periodo conocido como "romanticismo". Yo impulsaría una sensibilidad tragicómica, que sepa contemplarse con ironía.

¿Puede encontrar la belleza quien no empieza por buscarla en la crueldad? La más dura es la dictadura de la belleza. La crueldad real no tiene nada de bello ni poético, es el gran misterio de la humanidad. ¿por qué puerta entró el mal, quién dejo entrar a la crueldad, por qué permitimos que exista?

¿El que crea y comparte algo demasiado bello es el primero en volverse celoso de ello?

No soy particularmente celoso de mis creaciones, aunque tienen al público cautivo tampoco me pertenecen del todo. Me conformo con los derechos de autor y los autoservicios editoriales; siento que (en términos etéreos) las canciones perteneces a aquellos que las quieren escuchar, a los que las aprendieron a escuchar y cantar, incluso desafinados.

¿Se educa mejor el artista en la calle, o se educa mejor en la soledad? Yo aprendí en la calle, pero envidio las cualidades extraordinarias de los músicos especialistas, los virtuosos, los completos.

¿Cuándo uno se ha acostumbrado a la enfermedad, y ha aprendido a nutrirse de ella, descubrir el bálsamo es lo último a lo que se debe aspirar? Me temo que la pregunta va a permanecer intacta y sin respuesta, porque es una pregunta y una afirmación al mismo tiempo. Tantas veces he deseado encontrar el bálsamo como veces me permito caer en las sensibles redes del alma.

O se nace para martillo, o se nace para yunque. ¿Cuál de los dos es su caso? Si se nace para martillo, del cielo te caen los clavos. Hay que ser yunque para soportar los golpes, hacha y machete para bailar la salsa revolucionaria.

¿Andar contra la corriente tiene como meta llegar a la fuente del manantial? La maldición de los salmones es llegar rotos al rio, pero permanecer como salmones próximos y eternos. La eternidad es un segundo y le pedimos que resista mil años. Contra la corriente es manantial es permanente, porque lo impulsa la dinámica propia, la fuerza centrifuga del tiempo bien usado.

¿Dónde está el mar en el que el salmón desearía decir: “aquí me quiero ahogar”? En los brazos de mi mujer.

¿Por cuál de sus obras elegiría ser asesinado? O, dicho de otro modo, ¿a cuál de todos sus descendientes le jugaría el último lanzamiento de sus dados? "Invitación al suicidio de Juan Belmonte, matador de toros" Asi debería llamarse la obra que se lleve mi vida. Jugaría mis últimos dados a una Media Veronica de Jose Antonio Morante de la Puebla. Y trataría de no ser asesinado por mi perro.

¿Ser ídolo es cosa exclusiva de los que no pueden adorar? No estoy enamorado de mi trabajo, respeto la decisión del pueblo que me elige, pero prefiero mis adoraciones a las de los demás. Amar y ser amado, el complejo sentido de la vida.

¿A qué se debe que, en los últimos años, el mundo haya hecho del músico algo así como un gallo que anda de arriba abajo cacareando y tartamudeando? Nosotros entendemos que el resto del gallinero cacarea tartamudo, los gallos avisamos cuando viene clareando el día, y tal y como se dan las cosas últimamente, somos los que ponemos más huevos.