El aeropuerto internacional El Dorado de Bogotá será demolido y la capital del país contará con una terminal aérea totalmente nueva, a partir de marzo de 2012. Así lo anunciaron oficialmente la Aeronáutica Civil (Aerocivil) y el consorcio Opaín. Esta decisión se tomó con el fin de dar paso a un edificio nuevo el cual será desarrollado siguiendo los estándares de calidad, tecnología, capacidad y servicios de un terminal de talla internacional. La demolición se hará dentro del cronograma estipulado en el contrato. También habrá una nueva terminal adicional a la de carga y la internacional que no sólo darán más comodidad y funcionalidad para los usuarios del aeropuerto de Bogotá, sino que generarán mayores economías y eficiencias para operadores y aerolíneas. El costo estimado para el nuevo aeropuerto es de unos US$650 millones y se estima que podrá atender a 16 millones de pasajeros nacionales e internacionales y manejar 1,5 millones de toneladas de carga al año.