Para quienes tienen perros o mascotas saben que estos seres vivos ocupan un lugar muy especial en el hogar, sin embargo, por más que se intente dejar reluciente la casa normalmente tiende a coger el famosísimo “olor a perro”, por lo que esta sensación no siempre es agradable para el olfato de las personas.
Ahora bien y teniendo en cuenta lo anterior, los perros normalmente se acomodan en donde sienten que está su olor, lo que determina es que este es su espacio y le pertenece. Por ende, el perro tiende a ser territorial y es cuando en ciertos puntos de la casa se empieza a intensificar su olor.
Según el portal de la organización Red Canina, los perritos tienen una tendencia a mercar y remarcar lo que ellos consideran sus espacios, por ello si el propietario los deja subir a la o las camas de la vivienda, es muy probable que estos muebles y, sobre todo las cobijas, tomen mal olor o empiecen a “oler a perro”.
De acuerdo con esta entidad, cuando los perros tienen conductas de descanso en lugares que deben ser de los propietarios es importante bañarlos cada 20 o 30 días, puesto que esto permitirá que este tipo de olores particulares de la mascota no se conserve al interior del hogar o de las cobijas.
Otro punto muy importante es revisar y tener en observación el estado y la salud oral de los animales, pues el aliento de los perros más el uso de algunas fragancias del hogar pueden generar olores característicos de los peluditos.
Siendo esto, vale la pena destacar que los artículos del hogar son los mejores aliados para el aseo y la limpieza de la casa, aunque el peculiar olor del perro puede perdurar. Es por ello que hay algunos trucos caseros para poder contrarrestar este peculiar olor.
El bicarbonato y el vinagre se convierten en la mano derecha en este tipo de acciones, pues para que no exista el olor a perro es importante lavar sus accesorios con una solución de agua, bicarbonato y vinagre, el uso del jabón es opcional. Esta práctica debe realzarse por lo menos una vez al mes y así los olores estarán lejos del hogar y las cobijas.
El vinagre de manzana también es útil siempre y cuando se use en el proceso de lavado de las cobijas y alfombras del hogar; para ello hay que verter un cuarto de taza de este líquido junto con el detergente que se utiliza en la lavadora.
Asimismo, es importante tener recordar que el espacio siempre debe permanecer muy bien ventilado, por lo que abrir las ventanas o, incluso, los purificadores de aire pueden ser una solución útil.