¿Acaso comen pasto porque tienen una deficiencia en la dieta? o ¿lo comen porque están enfermos? La respuesta a ambas preguntas es no. Realmente la ciencia no ha descubierto por qué los perros y los gatos comen pasto, pero sí ha logrado identificar que no existe una correlación entre comer pasto y una falta nutricional o un síntoma de enfermedad.

De hecho, un estudio realizado por investigadores de la Universidad de California (Estados Unidos) planteó la hipótesis de que comer pasto es un comportamiento que los perros y gatos han heredado de sus antepasados. Según el estudio, comer pasto y otras hierbas enteras es un comportamiento que muchos mamíferos, tanto carnívoros como omnívoros, realizaban con el objetivo de prevenir parásitos.

Sin embargo, no es una teoría comprobada y hoy en día este comportamiento no cumpliría este propósito. Otra hipótesis de un estudio publicado en ResearchGate es que el pasto aportaba fibra a la dieta de los antepasados de los perros y los gatos y es un comportamiento que los animales domésticos aún conservan, aunque ya no cumple ningún papel importante.

En conclusión, tanto los hábitos alimenticios como la desparasitación veterinaria ya suplen lo que aportaba el pasto en la dieta de los gatos y perros domésticos. Hoy en día, ellos comen pasto porque evolutivamente saben que no les va a hacer daño y que, de alguna forma, puede resultar beneficioso.

Entonces, ¿por qué los perros y gatos vomitan tras comer pasto? El estómago de los mamíferos tiene neuro-receptores que responden a las características de los alimentos o productos que se ingieren, como la acidez, el contenido químico y las texturas. En el caso del pasto, su textura puede producir un tipo de irritación en el estómago, lo cual induce al vómito.

Esto también explica por qué no en todos los casos que los perros y gatos consumen pasto vomitan. Si el animal mastica bien la hoja de pasto, esta va a ser digerida con facilidad, mientras que si la traga completa puede generarle cosquilleo en el tracto digestivo y, en consecuencia, vómito.

Otra razón por la que comer pasto puede causar vómito es si este ha estado expuesto a pesticidas y otros químicos o si son hierbas venenosas de cualquier tipo. Lo ideal es asegurar que el perro o el gato no consuma todo el pasto que quiera y enseñarle que no todo el pasto es inofensivo.

¿Cómo asegurar que no les falte fibra ni otros nutrientes en sus dietas?

Otra creencia sobre el hábito de comer pasto en los animales de compañía es que lo hacen para ingerir más fibra, pero en general los perros y gatos que tienen una dieta establecida de concentrado ya reciben todos los nutrientes básicos. Sin embargo, no está de más complementar su dieta con algunos suplementos o con alimentos naturales.

Aunque hay alimentos que son tóxicos para los animales de compañía -como el chocolate- hay otros que aportan beneficios. Las carnes y proteínas pueden ser agregadas a su dieta, siempre que no tengan huesos o espinas con los cuales se puedan atragantar. En cuanto a las verduras, estas son las mejores para perros y gatos:

  • Verduras para perro: La zanahoria, la calabaza, las arvejas o guisantes, la espinaca, el apio, la lechuga y el repollo aportan fibra, vitaminas (A, B, C, E y F) y tienen propiedades antioxidantes, diuréticas, antiinflamatorias y digestivas. Para darle estos vegetales a los perros es importante que estén bien lavados y cortados finamente para evitar asfixias.
  • Verduras para gato: La zanahoria, el brócoli, la acelga, el pepino, las arvejas, la remolacha y la lechuga son los vegetales ideales para la dieta de un gato, ya que ayudan a que tenga un alto nivel de antioxidantes y mejoran la calidad ósea. Para dárselos es necesario lavarlos, retirar todos los tallos y hojas, y triturarlos para evitar que el gato se atragante.