¿Cómo nació la idea de escribir Biblioperrito?
Andrés Barragán: Siempre he sido un amante de las palabras. De hecho, eso me llevó a fundar y dirigir Punto Aparte Editores, una editorial que hace libros para empresas. Pero de un tiempo para acá empecé a pensar en crear una historia propia. A la par de esto, Rigo llegó a nuestras vidas. En la pandemia, un amigo lo rescató de la calle, pero no pudo quedárselo, por eso nosotros lo adoptamos. Cuando lo trajimos a la casa, se acostó cerca a una de nuestras bibliotecas, tumbó los libros y se quedó dormido. Yo aproveché para tomarle una foto y junto a mi esposa empecé a pensar en la idea de crear a un perro que amara los libros. Entonces decidí que ese sería el personaje con el que empezaría a crear y distribuir cuentos infantiles.
Decidí juntarme con Sebastián Calderón, el ilustrador, y Diego Cobos y Guillermo Torres, directores creativos, quienes también hicieron posible los volúmenes de Biblioperrito.
¿Por qué un libro infantil?
A. B.: El acercamiento de mis sobrinos con los libros me ayudó a entender la importancia que tienen para los niños. Con ellos reafirmé que los relatos para los pequeños cambian vidas y derriban las barreras que hay en el camino a la lectura. Esto es clave en un mundo que está tan saturado de contenidos audiovisuales. Por eso, nosotros decidimos apostar por un libro para niños, con el que se cultive el hábito de leer desde sus casas.
¿En qué se centran los volúmenes de Biblioperrito?
A. B.: El relato está hecho con el fin de cautivar la atención de los niños hacia historias de todo tipo. Por eso, el primero nace como un homenaje a los libros mientras que el siguiente se centra específicamente en las guías de aves para que los niños se puedan imaginar en ríos, árboles y montañas de todas las regiones del país.
¿Cómo ha sido la acogida?
A. B.: La aceptación ha sido buena. Biblioperrito se ha vuelto un personaje recurrente en los trabajos propuestos por los maestros de algunos colegios. Además, con ayuda de Alejandra Morales, quien ha sido una aliada indispensable en nuestro trabajo por difundir las historias de Rigo, hemos desarrollado una serie de talleres para que los niños se familiaricen con los libros haciendo actividades en torno a las aventuras del protagonista. También hemos mantenido contacto directo con varios lectores que nos han enviado videos de sus niños recitando de memoria los relatos. Por eso, en un futuro cercano queremos empezar a añadir contenidos adicionales para los padres porque sabemos que su contribución ha sido clave.
¿Qué se viene para Biblioperrito?
A. B.: La idea es que podamos seguir homenajeando los libros. Por eso, estamos pensando en hacer otros volúmenes que se centren en temas como la cocina, la ciencia ficción, pero siempre enfocados en un público joven. También queremos crear otras historias que protagonice Rita, la hermana perruna de Rigo. Estos relatos estarían pensados para niños más pequeños porque con Biblioperrito ya estamos llegando a un público entre los cuatro y siete años.
¿Cómo ha sido el recibimiento en las ferias del libro?
A. B.: Una locura. El año pasado estuvimos en la FILBO, en el estand de Colombia Ilustrada, y fue un éxito. Pudimos compartir con varios pequeños que se quedaron haciendo actividades. Nuestro siguiente paso será ir a la Feria del Libro de Guadalajara y otros eventos de México porque queremos llevar a Biblioperrito a otros países. Queremos adaptar nuestros contenidos a otras zonas publicando, por ejemplo, una versión del segundo volumen que se enfoque en las aves de territorios como España y México.
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