Los perros y gatos son cada vez más importantes en la vida de muchas personas. De hecho, una encuesta realizada por White Mountain Group estimó que en el 2022 la población de animales de compañía alcanzaría los 730 millones. Esto implica que son cada vez más las personas que incluyen a los perros y gatos en sus rutinas diarias, incluyendo la hora de dormir.
Esta es una práctica poco recomendable porque los perros y gatos pueden infectar a sus dueños con las siguientes enfermedades si comparten la misma cama:
- Anquilostoma: Healthy Children explica que los anquilostomas son parásitos con un tamaño de por lo menos 0,5 pulgadas de largo que naturalmente afectan al intestino delgado.
- Tiña: según la Clínica Mayo, la infección que más se relaciona con los hongos en la piel es la tiña, “una erupción cutánea causada por una infección micótica”, que en muchos casos se vincula con el pie de atleta y se extiende tras el contacto de una persona a otra o animal infectado. El principal síntoma que se distingue es la comezón en la piel, que provoca la aparición de escamas en los glúteos, brazos y piernas.
- Enfermedad del arañazo de gato: la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos puntualiza que esta enfermedad se debe a la infección de la bacteria Bartonella, que ocurre por el mordisco o el arañazo de un gato.
Adicionalmente, un estudio de Mayo Clinic argumenta que dormir con mascotas es un hábito común que puede afectar la calidad del sueño de las personas, pues los perros y gatos no tienen un sueño tan constante como los humanos y pueden tener otros hábitos que interrumpen el ciclo de sueño.
Un buen descanso: necesidad para humanos y animales de compañía
Luego de una buena noche de descanso, la toma de decisiones es mejor, el cuerpo se siente más alerta y capacitado para enfrentarse a lo que depare el día. Además, se ha demostrado que no tener un buen ciclo de sueño incrementa el riesgo a padecer afecciones cardíacas, enfermedades mentales y problemas en el sistema autoinmune.
La revista Topics in Companion Animal Medicine explica que en el caso de los animales de compañía lo normal es que duerman al menos doce horas diarias; pero, debido a su historia evolutiva, reparten este descanso en intervalos a lo largo del día. Adicionalmente, los gatos son más propensos a dormir durante el día ya que, al igual que los grandes felinos, tienen el instinto de cazar y saben que la mejor hora para hacerlo es de noche.
En ambos casos, el sueño es de suma importancia y los animales también pueden, al igual que los humanos, sufrir de desórdenes de sueño causados por factores externos e incluso experiencias pasadas. Se ha demostrado que los perros que han sido maltratados pueden generar síntomas de ansiedad que no les permiten dormir bien o pueden tener ansiedad por separación de sus dueños por lo que no pueden dormir en otra habitación.
¿Cómo mejorar el sueño de animales y dueños?
Un buen descanso, según la World Sleep Society, tiene tres elementos: la duración, la continuidad y la profundidad. Estos factores varían dependiendo de variables externas que se pueden controlar, como el lugar de descanso, y factores físicos que no se pueden controlar, como las condiciones médicas.
Para mejorar la calidad del descanso la clínica Mayo recomienda los siguientes pasos que se pueden implementar en la rutina diaria.
- Establecer un horario regular para despertar e ir a la cama y que asegure mínimo 7 horas de sueño.
- No realizar ejercicio o actividad física justo antes de ir a dormir pues esto activa los músculos y algunos procesos metabólicos que no permiten un buen descanso.
- Crear un entorno relajado que sea fresco, oscuro y silencioso. Para esto es necesario bloquear cualquier fuente de luz o sonidos que puedan interrumpir el sueño.
- Evitar fumar o consumir cafeína, alcohol y alimentos pesados antes de dormir. Estos pueden tener efectos estimulantes o pueden generar incomodidades a lo largo de la noche.
- Limitar las siestas durante el día o intentar que las siestas no sean mayores a 30 minutos.
En el caso los animales de compañía, estas son las recomendaciones que da Consumer y la fundación Affinity para mejorar la calidad de su sueño:
- Agotar su energía. Juegos, ejercicio o paseos largos aseguran que el perro o el gato duerman profundamente para recuperarse.
- La calidad de la cama. Elegir una suave y espaciosa asegura que los animales puedan estar cómodos e incluso que acepten que la cama de sus dueños no es su espacio.
- A diferencia de los humanos, los animales de compañía duermen mejor cuando comen justo antes de dormir. Esto significa que la mejor comida o la de más cantidad debe ser en la noche y así no se deben levantar ni molestar por hambre.