Destruida quedó la estación de Policía del corregimiento Aguaclara, en zona rural de Cúcuta, luego de que fuera atacada con ráfagas de fusil y explosivos en horas de la madrugada de este domingo 20 de febrero.
Aseguran que hombres fuertemente armados se ubicaron al frente de dicha estación de la Policía y, desde una zona boscosa, hostigaron durante varios minutos a los uniformados que allí se encontraban.
De acuerdo con Jairo Yáñez, alcalde de Cúcuta, por fortuna el hecho no dejó “bajas qué lamentar”, ni personas heridas.
“Apoyamos a nuestra fuerza pública, trabajando de la mano con la Secretaría de Seguridad Ciudadana, pero somos conscientes de que tenemos limitaciones en hechos que son parte de orden nacional”, dijo el alcalde de esa ciudad.
Y agregó Yáñez: “Rechazamos los comentarios de personas que no viven en la ciudad y no conocen la realidad, la situación de frontera nos hace permeables a la violencia, estamos en medio de un conflicto que afecta a toda Colombia”.
Además, el alcalde de Cúcuta indicó que en medio del último consejo de seguridad presidido por el ministro de Defensa, Diego Molano, se ordenó realizar patrullajes mixtos entre el Ejército y la Policía sobre tres ejes viales. Entre estos se encuentra la vía que comunica con Puerto Santander.
“Somos solidarios con los hechos que sucedieron en la población de Aguaclara. Afecta a ciudadanos, a la vida y la tranquilidad que todos queremos tener (…) Yo clamo por el respeto y clamo porque trabajemos unidos. Denunciemos a las autoridades y respaldemos a la Fuerza Pública”, agregó en mandatario de los cucuteños.
Vale destacar que el ataque de este domingo en la madrugada es el segundo repelido por la Policía en esta población, teniendo en cuenta que el anterior se registró el domingo 13 de febrero del presente año.
En la zona hace presencia la guerrilla del ELN, el Gaor 33, entre otros grupos armados ilegales que disputan el control de ese territorio por las rutas del narcotráfico.
Atentado en la Brigada 30 de Cúcuta: fijan fecha para audiencia
La Procuraduría General de la Nación confirmó que el próximo 2 de marzo, a las 2:30 p. m., será el inicio de la audiencia pública contra siete militares investigados por presunta omisión en la aplicación de los protocolos de seguridad en el cantón San Jorge de Cúcuta, el 15 de junio pasado, cuando fue activado un carro bomba al interior de esa instalación militar.
A la audiencia, “que se adelantará mediante el procedimiento verbal y de manera virtual”, según explicó el ministerio público, fueron citados el comandante de la Brigada 30 para la época de los hechos, coronel Ilvar Orlando González Villamil; el jefe de Estado Mayor Conjunto y segundo comandante de la Brigada 30, coronel Pedro María Vega Losada; el comandante del Batallón de Apoyo y Servicios de Cúcuta, teniente coronel Carlos Andrés Sarmiento Gutiérrez, y el oficial de operaciones de esa misma unidad, mayor César Alexander Carrero Salcedo.
También fueron citados el comandante de guardia en la fecha del atentado, sargento viceprimero Luis Eduardo Espejo López; el suboficial de administración en la guardia, sargento segundo Mario Andrés López Roque, y el cabo segundo Óscar Leonel Pava Caviedes, quien prestaba guardia en la entrada principal del cantón el día de los hechos.
Cabe recordar que en julio pasado fueron enviados a la cárcel el capitán en retiro Carlos Medina, su padre, un escolta y cuatro personas más, quienes están implicados en el caso.
Luego de que la Fiscalía les imputó los delitos de terrorismo, tentativa de homicidio en 41 personas, concierto para delinquir, porte de armas de uso privativo de las Fuerzas Militares y daño en bien ajeno, un juez de Cúcuta concluyó que los capturados no solo representaban un peligro para la sociedad sino que existía un riesgo de fuga y podrían, de permanecer en libertad, afectar el normal desarrollo del proceso, de ahí que ordenó su reclusión en una cárcel.
La investigación de la Fiscalía señala que el capitán Medina se encontraba en el lugar de los hechos el pasado 15 de junio. Un video revelado en el proceso deja ver al oficial en retiro mientras sale de la guarnición militar minutos antes de la explosión y en los detalles de la investigación se estableció que fue el mismo capitán quien ingresó el vehículo usado en el atentado.
De Medina se sabe que fue piloto de helicóptero, que era lancero y paracaidista, que salió del Ejército con una resolución de discrecionalidad, además de que fue, al parecer, investigado por ofrecer salvoconductos para el porte de armas. “Cuando estuvo en el Ejército hizo exigentes cursos como los de lancero y paracaidista. También recibió entrenamiento como piloto de helicópteros Black Hawk, en Estados Unidos, en la casa matriz de estas aeronaves”, dijo una fuente a SEMANA.
Además del ataque terrorista en contra del Ejército y en la Brigada 30, la Fiscalía tendría evidencia que vincula al capitán Medina con el atentado al helicóptero en el que viajaba el presidente Iván Duque en un recorrido por el departamento de Norte de Santander. La evidencia dejaría al oficial en retiro como un aliado de grupos criminales que afectan la seguridad y el orden en esa zona del país.