La selva amazónica brasileña perdió 842.600 hectáreas como consecuencia de la deforestación, que sigue rampante en ese país. Si bien esta cifra es un 8 % inferior a la registrada en el año inmediatamente anterior, sigue siendo una cifra extremadamente preocupante para los especialistas, que cuestionan la política ambiental del presidente Jair Bolsonaro. La superficie deforestada es cinco veces superior a la de la ciudad de Sao Paulo, la mayor de América Latina, según los datos divulgados este viernes por el Instituto de Investigaciones Espaciales (INPE), basados en observaciones satelitales. El dato, equivale a la desaparición de dos canchas de fútbol por minuto. En diciembre, la motosierra acabó con 21.600 hectáreas, frente a 19.000 afectadas en el mismo período de 2019. Le recomendamos: Nuevo récord de deforestación en la Amazonia brasileña en 12 años Los meses de mayor devastación fueron, como sucede todos los años, los de la temporada seca, con 165.000 hectáreas taladas en julio y 135.000 en agosto.
La deforestación en Amazonia brasileña superó el millón de hectáreas entre agosto de 2019 y julio de 2020. Foto. Greenpeace En 2019 el área arrasada alcanzó un récord de 917.800 hectáreas. Muchos expertos relacionaron ese aumento con la llegada al poder de Bolsonaro, que alienta el desarrollo de actividades agropecuarias y mineras en la selva tropical. "Bolsonaro lleva dos años de mandato y los peores datos ocurrieron bajo su gestión", argumenta Marcio Astrini, de la ONG Observatorio del Clima. "Los incendios forestales, tanto en la Amazonia como en el Pantanal, también se incrementaron dos años consecutivos. No son coincidencias, sino el resultado de políticas de destrucción ambiental impulsadas por el actual gobierno", agregó. Los datos divulgados este viernes fueron dados a conocer por el sistema DETER, que trata en tiempo real las alertas de deforestación enviadas por los satélites. El Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (Inpe) usa otro sistema, denominado Prodes, que presenta también los datos de deforestación en el año de referencia que va de agosto (inicio de la temporada seca) a julio del año siguiente.
La apertura de carreteras es otra de las causas de la deforestación en la selva amazónica brasileña. Foto: AFP Y esas cifras son aún más alarmantes, pues revelan que entre agosto de 2019 y julio de 2020 la deforestación amazónica llegó a 1,1 millones de hectáreas, lo que representa un alza de 9,5% respecto al año de referencia precedente. Le sugerimos: Amazonia brasileña es devorada por los incendios Entre agosto de 2018 y julio de 2019, el mismo sistema de vigilancia contabilizó 1.018.800 hectáreas arrasadas, lo cual había marcado un aumento de 43% frente a los doce meses precedentes. Estos han sido los peores años desde 2008, cuando se registraron más de 1,2 millones de hectáreas deforestadas. Los incendios forestales en la región se incrementaron en 2020 en un 16%, con 103.000 focos contabilizados por los satélites. También se contabilizaron 22.000 focos (+120%) en el Pantanal, el mayor humedal tropical del planeta, que perdió casi un tercio de su superficie a causa del fuego. *Con informaciíon de AFP