Hoy cuando se celebra por primera vez el Día Mundial del Vehículo Eléctrico, el panorama en cuanto a la penetración de este tipo de automotores no está muy despejado, a pesar de los avances registrados en los últimos años. De acuerdo con un estudio realizado por la consultora internacional Arthur D. Little, el país solo alcanzaría un total de 190.000 vehículos para el 2030, cifra que se ubica muy por debajo de la última meta oficial de 600.000 vehículos eléctricos para ese año. Según datos de la Asociación Nacional de Movilidad Sostenible (Andemos), entre enero y agosto de este año se comercializaron 2.521 vehículos eléctricos e híbridos en el territorio nacional, cifra que si bien es superior a la registrada en el mismo lapso del año pasado, sigue siendo muy reducida. “Esto se debe, en gran medida, a los impactos negativos de la crisis de la covid-19 que retrasará las metas de crecimiento de la movilidad eléctrica en el territorio nacional”, explicó Rodolfo Guzmán, responsable de Arthur D. Little para Latinoamérica y del estudio. El experto también llama la atención en torno a que en el segmento de vehículos particulares, el sobrecosto de los carros eléctricos y la limitada infraestructura pública para recarga eléctrica constituyen las principales barreras para el crecimiento en la región. Le recomendamos: Aumenta el número de carros eléctricos rodando por el país "En Colombia actualmente el costo total para el consumidor de un vehículo eléctrico, incluyendo sus gastos de operación, todavía excede en más de un 50 por ciento al costo de su vehículo equivalente de combustión interna, a pesar de los incentivos que se han otorgado. Sin embargo, se espera que esta ecuación comience a emparejarse hacia el 2030 debido a las reducciones en los costos de las baterías eléctricas”, dijo. No obstante, el estudio indica que si bien Brasil será el país latinoamericano con mayor número de vehículos eléctricos en términos absolutos, superando el millón de unidades para el 2030, Chile, Colombia y Uruguay tendrían las tasas de penetración más elevadas, con niveles sobre 1,6 por ciento. Un factor de transformación El presidente del Consejo Mundial de Energía Colombia (WEC por su sigla en inglés), José Antonio Vargas, sostuvo que la movilidad eléctrica es fundamental en la transformación energética actual, siendo un factor que opera transversalmente en los cuatro ejes de la transición energética definidos por el WEC: Descarbonización, descentralización, digitalización y demanda.
Carros eléctricos de la compañía Celsia. Agregó que trae desarrollos como nuevos modelos de negocio, vehículos más sofisticados y eficientes, estaciones de carga en los hogares, aplicaciones móviles que permiten la venta de energía de personas naturales para vehículos con un clic, dando un mayor poder de participación a los usuarios y amplificando el acceso a la movilidad eléctrica. Por otro lado, Vargas aseguró, que los vehículos eléctricos son considerados un alivio para el sistema, puesto que pueden cumplir funciones de almacenamiento de energía, solucionando una de las mayores problemáticas de las energías renovables intermitentes, y por lo tanto, convirtiéndose en un complemento ideal a estas. "Igualmente, la movilidad eléctrica juega un papel clave en temas de medio ambiente. Como lo ha mencionado el Gobierno colombiano en varias ocasiones, las fuentes móviles aportan el 80 por ciento de partículas al aire y el 20 por ciento restante se atribuye a las fuentes fijas”, subrayó. En su concepto, los vehículos se convierten en un punto esencial para la descarbonización del sector, por lo que si se combinan las energías renovables y la movilidad eléctrica, se realizará un gran aporte no solo al medioambiente, sino también a la salud pública. Otros datos de interés dados a conocer en el estudio, en el marco de e-mobility talks, evento convocado por el Consejo Mundial de Energía Colombia y el Clúster de Energía Eléctrica de Bogotá, están relacionados con que a nivel global la participación de mercado de los vehículos eléctricos es del orden del 2,6 por ciento y su penetración en el parque vehicular global es de tan solo un 1 por ciento, con un stock de 7.2 millones de vehículos eléctricos al cierre de 2019. La proyección es que en la próxima década la movilidad eléctrica se acelere significativamente en el mundo debido principalmente a los avances en las tecnologías de baterías que permitirán reducir costos e incrementar el rango de operación. Le sugerimos: Los 6 temas pendientes para lograr una verdadera movilidad sostenible Se espera que la penetración de vehículos eléctricos en el parque global se ubique en un rango de entre el 7 por ciento y 12 por ciento para el año 2030, con una participación en las ventas superior al 20 por ciento para ese año. Por su parte, Latinoamérica está muy rezagada con respecto al resto del mundo con un stock de apenas unos cien mil vehículos eléctricos. Según el escenario base de Arthur D. Little en la región los avances serán más modestos con una penetración de escasamente un 1,1 por ciento para el 2030. Se trata de una región que enfrenta desafíos significativos para que la movilidad eléctrica pueda despegar, pero existen grandes oportunidades sobre todo en el segmento de buses eléctricos para el transporte público. Una de las principales conlusiones es que estos avances dependerán en gran medida de la efectividad de las políticas públicas y de la correcta aplicación de incentivos para dinamizar a este sector.